Según se pudo conocer, el rodante, marca Hyundai Tucson, fue rociado con gasolina por desconocidos.
El Rector (e) entregaría ayer en la noche su versión de los hechos; sin embargo, se pudo establecer al cierre de esta edición que los ‘desadaptados’ tiraron unas bolsas con gasolina, que luego fueron incineradas.
“Parece que dejaron debajo del carro unas bolsas rotas, y cuando empezó a regarse la gasolina alguien pasó y le prendió fuego”, señalaron testigos.
Los motivos del hecho aún se desconocen, sin embargo, el automóvil es de propiedad del docente Édgar Díaz, quien dicta algunas asignaturas en la facultad Medicina Veterinaria y Zootecnia.
“Cuando la camioneta empezó a incinerarse, un docente que parqueaba su vehículo sacó su extintor y apagó las llamas”, contaron los testigos.
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