En una operación liderada por el Gobierno colombiano, dos vuelos humanitarios trajeron de regreso al país a cerca de 200 connacionales desde Estados Unidos, en medio de tensiones diplomáticas con la administración estadounidense. El presidente Gustavo Petro destacó que los retornados llegaron bajo condiciones respetuosas y reiteró que no se trata de criminales, como lo había señalado anteriormente el presidente Donald Trump.

El primer vuelo, con 110 colombianos, aterrizó en el Comando Aéreo de Transporte Militar (CATAM) este martes 28 de enero, a las 7:45 a. m., procedente de El Paso, Texas. Un segundo avión, con aproximadamente 90 personas, se esperaba desde San Diego. Estas acciones se llevaron a cabo tras un fuerte intercambio entre los dos mandatarios en días anteriores.

El pasado domingo 26 de enero, Petro había anunciado la negativa a recibir a los connacionales debido a las condiciones “indignas” en las que serían trasladados, lo que generó tensiones en la relación bilateral. Sin embargo, el mandatario colombiano decidió intervenir para garantizar que el retorno se llevara a cabo de forma adecuada.

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“Vienen nuestros connacionales desde EE. UU. libres, dignos, sin estar esposados. Estructuramos un plan de crédito productivo, asociativo y barato para el migrante. El migrante no es un delincuente, es una persona humana libre”, aseguró el presidente Petro en su cuenta de X (antes Twitter).

El Gobierno colombiano aclaró que ninguno de los repatriados tiene antecedentes penales, desmintiendo las afirmaciones realizadas por Donald Trump, quien había calificado a los deportados como criminales. Además, las autoridades anunciaron medidas de apoyo para facilitar la reintegración de estas personas a la vida en Colombia.