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Desde su idea hasta en sus bocetos, Cifuentes no divide el trazo de su diseño por géneros, sino que busca que la gente se sienta cómoda más allá de los arquetipos impuestos socialmente.
“Si a alguien le gusta una prenda que se la ponga, no importa si es de hombre o mujer, lo importante es que sea a gusto y haga sentir a la persona libre así como también cómoda”, comentó el diseñador.
Su historia
Cristian Cifuentes creció en medio de retazos y del sonido estridente de la máquina de coser de sus abuelos, pues ellos se encargaban de soltarle el dobladillo a los pantalones escolares de los niños, hacer remiendos, elaborar ese vestido inolvidable de quince años de la hija de doña ‘Pepita’. ‘Los chaba’ eran los encargados de sacar de apuros en cuanto a ropa a los vecinos en Espinal.
Lo que él nunca imaginó fue que después de terminar sus estudios de secundaria y encontrarse ante un futuro incierto, terminaría matriculado en el programa de Diseño de Modas de la Corporación Unificada Nacional de Educación Superior, CUN. A pesar de que Cristian no logró culminar su carrera en esta institución, sí adquirió los elementos y la pasión necesaria para estudiar en el Sena un técnico en Patronaje Industrial y emprender con su marca de ropa Schabarel.
‘Chaba’ + Schiaparelli = Schabarel
El nombre de toda marca tiene su historia y la de Schabarel no es la excepción ya que este se compone del sobrenombre que recibían los abuelos del diseñador ibaguereño, ‘los chaba’, como también incluye parte del nombre de la diseñadora italiana Elsa Schiaparelli, una mujer que se encargó de fusionar la alta costura con el arte y logró encantar a Cristian a tal punto de ser su referente para hacer de Schabarel una marca que rompe lo establecido.
“Mi nicho de mercado es más hacia lo masculino porque los hombres son quienes más miedo tienen de usar prendas diferentes, pero también diseño para las personas que quieran ser libres, que quieran usar una prenda no convencional”, expresó Cifuentes.
Proyecciones
Emprender no es fácil, especialmente cuando los recursos son limitados y aunque en ocasiones el crecimiento de una empresa parezca lento Cifuentes seguirá trabajando arduamente para lograr registrar su marca y participar en las diferentes ferias y concursos que se realicen en Ibagué. Además, espera poder pasar su tienda de lo virtual a lo presencial, pero como él lo indicó “la plata manda la parada”. Así que por el momento seguirá siendo para su emprendimiento el diseñador, el de patronaje, quien confecciona, realiza marketing y hasta el administrador.
Es importante que las personas apoyen los emprendimientos locales, nosotros los emprendedores trabajamos con amor y calidad, así que valoren nuestro trabajo y no pidan rebaja, comprendan los grandes costos que asumimos para entregar productos auténticos, CRISTIAN C.
DATO
Los diseñadores de moda durante décadas se han encargado de indicarle a la sociedad qué colores están en tendencia, la ropa que le sienta mejor a cada cuerpo, las texturas ideales para cada clima, en pocas palabras, se han encargado de establecer cómo vestir.
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