Estos meses, tienen una magia singular: diciembre se tiñe de luces y festividades navideñas, mientras que enero abre la puerta a un nuevo año con oportunidades para explorar destinos menos concurridos y apreciar experiencias más íntimas.

Diciembre atrae con la promesa de mercados navideños centelleantes, festividades culturales arraigadas y un ambiente festivo que se extiende por cada rincón del planeta. Es un momento donde las ciudades se iluminan con luces parpadeantes, los aromas de comidas tradicionales invitan a saborear nuevas delicias y las celebraciones culturales resaltan las tradiciones únicas de cada lugar.

En contraste, enero se presenta como un momento ideal para aquellos que buscan escapar del ajetreo típico de diciembre. Los destinos tienden a ser más tranquilos, permitiendo a los viajeros disfrutar de lugares emblemáticos sin las multitudes habituales. Además, las tarifas a menudo son más accesibles y hay una sensación de renovación en el aire, ideal para aquellos que desean comenzar el año explorando nuevos horizontes.

La elección entre viajar en diciembre o enero depende en gran medida de las preferencias individuales de cada viajero: sumergirse en el espíritu festivo de diciembre o aprovechar la calma y la serenidad que ofrece enero. Explorar destinos en estas épocas del año proporciona una oportunidad única para experimentar la diversidad cultural y la belleza del mundo en un contexto festivo o en la serenidad de un nuevo comienzo.

En este sentido, nuestro país no es una excepción. Según Paula Ximena Meneses, Líder del Programa Profesional en Turismo y Gastronomía de UNINPAHU, “resulta más conveniente viajar en enero, ya que algunos destinos pueden presentar menos congestión y se evita la saturación de la capacidad de carga de los espacios”.

Ventajas y Desventajas

Con relación a los viajes durante el mes de enero, la también Líder de la Tecnología en Gestión Turística y Hotelera de UNINPAHU, destaca que “si se realizan las reservaciones con anticipación, es posible encontrar opciones más económicas durante esta época del año”.

Esta estrategia se ve respaldada por la posibilidad de acceder a múltiples descuentos y ofertas especiales diseñadas para hacer más atractiva la oferta turística, permitiendo a los viajeros obtener tarifas más accesibles en alojamientos, tours y actividades recreativas.

Además, Meneses enfatizó que “la planificación previa para viajar en enero puede ser beneficiosa en términos de costos y disponibilidad”. Esta planificación estratégica no solo posibilita asegurar precios más asequibles, sino que también ofrece una mayor flexibilidad y opciones de elección en cuanto a destinos, horarios de vuelos y alojamientos, lo que contribuye a una experiencia de viaje más personalizada y satisfactoria para los turistas.

Al hacer las reservas con antelación, los viajeros pueden aprovechar las ofertas y promociones exclusivas que suelen estar disponibles para aquellos que se preparan con tiempo para disfrutar de un viaje más económico y placentero en el mes de enero.

Destinos más atractivos

La experta en temas de Turismo también hizo mención sobre algunos destinos que valdría la pena visitar en estas festividades, entre ellos el Departamento de Boyacá. Este atractivo lugar ofrece a sus visitantes un sensacional espectáculo de luces en municipios como: Tunja y Villa de Leyva. Asimismo, una opción similar podría disfrutarse en el Departamento del Quindío y en el Departamento de Antioquia.

En definitiva, tanto diciembre como enero ofrecen oportunidades únicas para los viajeros que buscan experiencias diversas y enriquecedoras. Sea disfrutando del ambiente festivo de diciembre o aprovechando las ventajas económicas y la flexibilidad de planificación en enero, ambas épocas invitan a explorar el mundo de manera especial.

La clave radica en la planificación anticipada y en considerar las preferencias individuales para encontrar el momento perfecto y el destino ideal que se ajuste a los intereses y expectativas de cada viajero, garantizando así una experiencia memorable y gratificante.