Cada nuevo cumpleaños trae una experiencia determinante, una enseñanza, un grupo de logros y la clara evidencia del crecimiento continuo. Así ha ocurrido durante los 44 años de historia de la Universidad de Ibagué.

 Se ha visto en el camino andado desde el 27 de agosto de 1980, en medio de satisfacciones, transformaciones y la vinculación cada vez más fuerte al territorio a través de sus estudiantes, docentes, funcionarios y programas.

Del 43 al 44: un gran paso

Este aniversario se celebra con el respaldo de haber obtenido, en mayo pasado, la reacreditación en alta calidad por el Ministerio de Educación, que equivale a seis años más de reconocimiento como una Institución de excelencia.

En este segmento de la línea de tiempo también ganan espacio de honor los triunfos de docentes y estudiantes con investigaciones innovadoras, la expansión de la insigne Escuela Internacional de Verano en su edición 15 y la recepción de eventos de alta importancia nacional e internacional como el reciente Congreso Colombiano de Transporte y Tránsito.

Así, se ratifican los principios, la misión y la visión de lo que décadas atrás inició como la Corporación Universitaria de Ibagué, Coruniversitaria, y se consolidó 25 años más adelante como lo que hoy es, la Universidad de Ibagué.

Es una alma mater que continúa adaptándose a las necesidades educativas del presente y el futuro, con la pronta puesta en marcha de nuevos programas: tres maestrías virtuales integradas en el proyecto Universidad Híbrida y el pregrado presencial de Ingeniería en Analítica de Datos.

El liderazgo es continuo y conjunto: Paz y Región, Centro de Consultoría Empresarial, Dirección de Investigaciones, Responsabilidad Social Integral, Unidad de Aprendizaje para la Vida (AVE), Unidad de Prácticas y Empleabilidad, Bienestar Universitario, Unidad de Relación con Graduados, Centro de Idiomas, Unidad de Emprendimiento, la Biblioteca, Oficina de Relaciones Internacionales...

Con estos y muchos más programas, dependencias, proyectos e iniciativas, a partir del equipo humano y su experticia, se sigue construyendo la Universidad de Ibagué y, con ella, el desarrollo regional.