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El hombre que tiene la mayor opción de ganar, es Lee Jae-Myung, quien nació en un humilde hogar de familia campesina en Andong, provincia de Gyeongsang del Norte, en 1964, en esas condiciones tuvo que luchar muy fuerte para poder sobresalir, pues como el sistema de escuelas públicas de Corea solo cubría la educación primaria en ese entonces, no pudo asistir a la escuela media y secundaria; luego sus padres migraron hacia Seongnam, donde tuvo que trabajar duramente durante su adolescencia en factorías para poder estudiar, durante estas actividades sufrió varios accidentes de trabajo.
Con esfuerzo se matriculó en la academia, pero tuvo que abandonarla por falta de recursos; no obstante y debido a su buen desempeño recibió el apoyo de sus maestros, quienes le dieron clases gratuitas. Ya en 1978, aprobó el examen de ingreso para la escuela secundaria y dos años después, accedió al examen para ingresar a su carrera universitaria como abogado.
Estas vivencias en medio de la pobreza serían el sustento de su formación demócrata y la base para su formación y filosofía política. Como abogado de derechos civiles, luchó por el bienestar de los trabajadores y sus familias, siendo influenciado por Roh Moo-hyun, quien más tarde sería presidente del país.
Ingresó a la política, pero fue derrotado en las elecciones a la alcaldía de Seongnam en 2006 y en las elecciones legislativas de Corea del Sur en 2008; sin embargo su persistencia lo llevó a ser electo a la alcaldía de Seongnam en 2010, siendo reelegido en 2014; posteriormente se postuló y ganó las elecciones de gobernador de la provincia de Gyeonggi.
Para poder aspirar a la presidencia tuvo que renunciar a su cargo como gobernador, por lo que ahora es el candidato con mayor posibilidad de ganar las elecciones, enfrentándose a su más enconado rival, el ex fiscal general de la Nación, candidato por el Partido del Poder Popular (Conservador) Yoon Suk-yeol.
La importancia de la elección de Lee Jae-Myung, radica en que al pertenecer y tener las convicciones del partido demócrata (Centro) se estaría garantizando un equilibrio en las relaciones de poder con el país vecino Corea del Norte, además de políticas sociales para la población menos favorecida en Corea del Sur; su lucha y su historia de vida, serían el garante de estas propuestas que beneficiarían a toda la población del país asiático.
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