Algo falta...

El profesor Alberto Daniel Malpica Romero del Instituto Tecnológico de Monterrey México, sostenía en una conferencia a la que asistimos que “la razón principal de los fracasos suele ser la poca paciencia o mejor aún la falta de perseverancia” de quien se inicia en el mundo empresarial. Para el profesor en mención se hace necesario que el emprendedor entienda que antes de llegar al éxito se debe emprender un número alto de negocios dado que emprender se aprende emprendiendo. 

Lo anterior nos lleva a señalar que no es suficiente tener la idea, el deseo, la capacitación y los recursos como garantía para que los emprendedores sean exitosos con sus ideas de negocio. Se hace necesario trabajar mucho más en EL SER a partir de lo que considero es fundamental para este gran reto, me refiero a trabajar en el “Autoestima y Logro” en cada una de las personas que se aventuran a ser emprendedores, es decir, hacer que el emprendedor se empodere en primera instancia. Recuerdo aquí al Dr. Leónidas López Herrán, ex rector de la Universidad de Ibagué, quien sostenía que, si “el payaso no cree en la prueba, la prueba no sale” y efectivamente es así.

El emprendedor debe ser ante todo un líder con firmeza y coraje, con capacidad de riesgo tal que le permita iniciar un proyecto a partir de vislumbrar la oportunidad del negocio alrededor del cual tiene intereses y vocaciones específicas, sostiene el profesor Sergio Albano. Lo anterior reafirma mi tesis, se tiene que trabajar en EL SER y no solamente en el hacer. En ese sentido creo que las diferentes instituciones que hoy apoyan y respaldan el emprendimiento se están quedando cortas a no trabajar o fortalecer esta competencia o habilidad en el emprendedor. 

Según “El libro negro del Emprendedor” el aspirante a empresario debe revisar y apropiar errores que llevan al fracaso y que impiden triunfar en un emprendimiento. Aquí destacamos algunos: 1. Emprender con un motivo, pero sin una motivación 2. No tener carácter de emprendedor 3. No tener la garra de un luchador 4. Acompañarse de socios cuando en verdad puedes prescindir de ellos 5. Equivocarse en la selección de los socios al no contar con criterios de selección relevantes 6. Llevarlos en condiciones iguales cuando no todos aportan lo mismo. 7. Falta de confianza y comunicación entre los socios 8. Pensar que de la idea depende el éxito 9. Entrar en sectores económicos que no gustan o no conocen 10. Escoger sectores económicos poco productivos 11. Hacer depender el negocio de las necesidades familiares y las ambiciones materiales 12. Emprender sin asumir el impacto que tendrá sobre nuestro equilibrio vital 13. Crear modelos de negocios que no dan beneficios rápidamente y de un modo sostenible 14. Quedarse en ser emprendedor y no empresario a no tomar decisiones a tiempo.

Con lo anterior me reafirmo en que además de la idea, el deseo o necesidad, el emprendedor debe auto prepararse además de los aspectos técnicos de montaje y desarrollo de negocios, en lo psicológico, casi que requiere de un fuerte entrenamiento de su estructura mental, de su auto estima y capacidad  de logro, factores a tener en cuenta por las instituciones que hoy fomentan el emprendimiento con tal de mejorar la eficiencia y eficacia en la asignación de recursos para esta línea estratégica de desarrollo económico.