Ibagué, futuro y realidad del recurso hídrico (parte I)

Camilo E Delgado Herrera

Así fue denominado el foro llevado a cabo el pasado viernes en la capital tolimense, organizado por la Administración municipal, Cortolima y la Cámara de Comercio de Ibagué, al cual, en su inicio, acudieron un numero importante de ciudadanos, empresarios, líderes comunales y, por supuesto, algunos candidatos a la Alcaldía de Ibagué y Concejo Municipal, para estos días infaltables asistentes a cuanto evento se realiza, aunque a muchos de ellos no se les veía ni en las curvas durante los últimos 4 años y quienes en la medida que fue avanzando la jornada de discusión abandonaron sigilosamente el auditorio.

Pero a ese tema no me referiré, se avecinan meses donde la palabrería, los discursos y la politiquería de algunos que osan autoproclamarse “salvadores” y “redentores de la moral” prometerán solucionar de manera definitiva todos los problemas de la ciudad, en especial el tema del agua, pero que después de elegidos sus palabras volverán a ser solo amargos recuerdos de campaña.

El tema realmente importante y preocupante es y seguirá siendo el presente y futuro de nuestro recurso hídrico y la posibilidad real para que éste último sea un poco más esperanzador si logramos contar con el apoyo presupuestal del Gobierno Nacional, desde el cual, como ya se volvió costumbre en nuestra ciudad, se dio un nuevo “ultimátum”, esta vez por parte del ministro de Vivienda, Luis Felipe Henao, que se suma a los ya lanzados de manera reiterativa por el Vicepresidente de la República Germán Vargas Lleras, advirtiendo al señor Alcalde de Ibagué Luis H. Rodríguez que de no concretar lo correspondiente al futuro de las obras del Acueducto Complementario antes del 20 de junio, previo a iniciar la Ley de Garantías, los $60.000 millones comprometidos por la Nación para este proyecto serán reorientados a la Unidad de Gestión del Riesgo para el desarrollo de pozos en el Departamento de la Guajira.

Dentro de lo que expuesto por parte del Gerente del IBAL S.A. E.S.P. del llamado “Plan Maestro de Abastecimiento de Agua”, el proyecto acueducto complementario con fuente alterna de captación, que vale la pena recordar cumplió 20 años desde que inició su formulación y estructuración en 1995, junto con “otros sistemas de abastecimiento”, son los pilares fundamentales que lo estructuran.

Del primero, como todos sabemos, se han invertido más de $18.692 millones de pesos en la Primera Fase de la primera Etapa de las seis que componen el Proyecto, recursos representados en estudios técnicos por valor de $351 millones (año 2005), construcción de Bocatoma $1.058 millones (año 2007), compra de tubería por $10.000 millones (año 2009) y el cuestionado contrato 060 de 2011 suscrito con el Consorcio Acualterno por valor de $6.296 millones para la realización de obras de conducción consistentes en la instalación de 4.7 kilómetros de tubería y accesorios, obras a la fecha inconclusas, y donde el contratista reclamaba un “ajuste” del contrato por el orden de los $18.000 millones de pesos (200% más del valor inicial), aspectos que llevan a que hoy tanto el contrato como las obras estén en un limbo financiero, administrativo y jurídico, incertidumbre que podría generar como consecuencia que estemos ad portas de perder los recursos que desde la nación se habían comprometido en el año 2012 para este trascendental tema. (Continúa…)

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