Uno de los criminales más perseguidos en la historia de Colombia fue sin duda alguna Pablo Escobar.
Según diferentes versiones, su sometimiento se logró gracias a una alianza soterrada entre el Estado y los narcotraficantes del cartel de Cali.
Hace poco en México, el Mundo conoció la historia de otro narcotraficante, el Chapo Guzmán, a quien las autoridades del hermano país lograron poner tras las rejas en varias ocasiones, pero siempre lograba evadirse. Hoy, afortunadamente el capo se encuentra recluido en una prisión de los Estados Unidos.
En la misma vía, cuando se desarrollaban los diálogos de paz en La Habana, la guerrilla de las Farc insistió en la liberación del mal llamado ‘canciller’ de esta guerrilla, Rodrigo Granda. Otro bandido que para fortuna de los ciudadanos, logró ponerse tras las rejas.
Pero existen otro tipo de delincuentes iguales o peores que los anteriores, quienes también deben ser cobijados por la acción de la justicia.
Bandidos de cuello blanco que sin ningún escrúpulo montan ejércitos políticos completos a través de las denominadas nóminas paralelas en secretarías de salud de ciudades capitales, en lugar de destinar los recursos oficiales para salvar vidas humanas.
Pero es que además de despilfarrar la plata de la salud en millonarios contratos, estos delincuentes de bata blanca terminan entregando la plata de la alimentación escolar a empresas cuestionadas a las cuales no les importa que los niños sufran de desnutrición o sean internados en centros hospitalarios por consumir alimentos descompuestos.
Claro que así como ocurrió en casos históricos como el de Al Capone, personaje siniestro del siglo pasado que terminó en la cárcel por evasión de impuestos, y no por los múltiples crímenes que cometió. Parece que la fiscalía operará en los próximos días para evitar que la impunidad siga reinando y se sigan despilfarrando los dineros del pueblo, por un tema no tan grave como los anteriormente descritos pero que igual pondrá tras las rejas a una persona que resulta ser un peligro para la sociedad.
Ojalá que estos bandidos disfrazados de abuelitos de la caridad no sigan dilatando con argucias jurídicas su presentación ante la justicia. Que le den la cara a las autoridades competentes y no sigan violando la ley.
Saque de banda: enhorabuena por la alianza entre periodistas, empresarios y ciudadanos para defender a Ibagué de los atropellos que se pretenden cometer por parte de la Administración municipal con el aumento del impuesto predial. Todo mi apoyo y solidaridad con esta noble causa.
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