De las estrategias y el mal gobierno

El estado de las vías es un componente determinante en la movilidad, la accidentalidad y la productividad de la ciudad. Afecta, aunque en distinto grado, al transportador, peatón, empresario y trabajador. El mantenimiento oportuno y de calidad, que incluya señalización y semaforización, puede hacer la diferencia con la visión de caos que percibe el ciudadano. Es tan relevante que universalmente se reconoce su papel decisivo en la estructuración de una ciudad amable.

Transporte, tránsito, movilidad y caos (segunda parte)

Ya referenciamos, la semana pasada, los problemas en la implementación del Sistema Estratégico de Transporte, ahora revisemos, en esta segunda parte, lo que ocurre en tránsito y movilidad. En el primero, esto es, en tránsito, la gestión es deplorable, seguramente es una de las entidades (la Secretaría) más anticompetitivas del país, está siendo devorada por la desidia, la desatención y el atraso. Van cuatro secretarios en tres años, más de tres mil quinientos trámites represados, agendas para realizar un simple trámite como cambio de propietario, expedición de una licencia de conducción, o cambio de color del vehículo que pueden tardar hasta tres meses en Ibagué, esto es inconcebible, máxime cuando estos mismos trámites se hacen, en otras ciudades, en una hora.

Para cosechar hay que sembrar

En el sector rural de Ibagué hay un motor fundamental del desarrollo económico (por supuesto del social también, sobre todo para quienes lo habitan) y es un motivo más que suficiente para alzar la mirada y concentrar esfuerzos de inclusión en la agenda y un abordaje que permita, a través de una política pública local, pero en sintonía con los planteamientos del Gobierno Nacional, en especial lo que quedará plasmado en el Plan Nacional de Desarrollo, superar los principales problemas que aquejan el campo, tales como la pobreza, la desigualdad (tanto económica como de acceso a recursos tecnológicos), la migración, la educación, el acceso al sector rural (vías), oportunidades a los campesinos para la producción y la comercialización  (lo que llamamos créditos útiles -que de verdad contribuyan al progreso en montos, tasas de interés y acceso y, para esto, no hay que ir muy lejos, solo hay que mirar un ente descentralizado del orden municipal).

Otro camino

No solo es posible sino necesario empezar a transitar un camino diferente, de lo contrario, como aquella frase célebre atribuida a Einstein pero que, la evidencia indica que podría ser (tampoco hay certeza, porque pudo ser anterior) de la escritora Rita Mae Brown en su novela “Muerte súbita”, “Locura es hacer lo mismo una y otra vez esperando obtener resultados diferentes” y así es, son décadas de abandono y relegación en el escenario nacional que señalan, ser necesario, tomar otro camino bajo una visión de ciudad desarrollada, incluyente, próspera en la que tengamos espacio todos los habitantes y, por supuesto, quienes nos visiten.

Intransitable

Las vacaciones de fin de año pusieron al descubierto, aun cuando ya era de público conocimiento, pero poco se decía o informaba al respecto, el estado de las carreteras en gran parte del país, no de ahora, de muchos años atrás, pero que en esencia, suponen una lectura del atraso vial y las barreras a la competitividad de Colombia, impuestas, la mayoría de las veces, por la corrupción. Pero miremos un poco más detenidamente (solo por citar dos de los muchos casos), cómo, la defraudación al Estado (y, claramente, a los colombianos), nos tiene en este mercurio intransitable.

¡Es la economía!

Las noticias económicas para Ibagué nada que mejoran, a las cifras de desempleo de finales de diciembre, hay que sumar los números arrojados en el Índice de Precios al Consumidor –IPC- publicada por el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas -Dane- de la semana pasada, en el cual, la ciudad tuvo una variación del 14,18 % para el 2022, superior a la media nacional que se ubicó en el 13,12 %. Ya bastante hemos cuestionado el pobre desempeño de la Administración municipal en estas aguas, en las que parece, no sabe navegar, pero miremos un poco el impacto negativo que tienen estos indicadores, en la vida diaria de los ibaguereños.

Con la expectativa de un nuevo comienzo

Inició el 2023 y las expectativas por este nuevo comienzo son enormes, ante los retos que supone para el país y, por supuesto, para Ibagué, donde expertos economistas anticipan que será este, un año de recesión, no solo en Colombia, sino en el mundo entero, un reto grande y, a la vez, una oportunidad para alcanzar un año disruptivo, que, por el contrario a los “vaticinios”, traiga bienestar para toda la población.

¿Estamos un paso adelante o muchos años atrás?

Iniciemos con lo importante y luego pasamos a lo urgente para los ibaguereños. Antes que nada, les deseo una Feliz Navidad para todos ustedes y sus familias, esperando que sus proyectos, sueños y anhelos sean un propósito firme de Nochebuena y de cara al año que inicia, recordemos que es tiempo de paz, fraternidad, unión familiar y mucha meditación.

Con la lupa en el Setp

En este momento, en Ibagué, el acuerdo empresarial que creo a Sitsa, está deshecho, pues de las 7 empresas que deberían conformarlo, 2 están por fuera (y, estas 2, representan, al menos, el 60% de la operación) y ante esto nos preguntamos ¿cómo piensa contratar la Administración municipal las obras, sin haber definido lo sustancial que es el operador? Aquí nos deben una explicación.