Como ibaguereño estoy muy agradecido con Leonidas López Herrán por haber decidido poner su nombre a consideración de mis coterráneos y participar en la próxima elección del 27 de octubre por la alcaldía de la Capital Musical. Se trata de una campaña de origen cívico, con el aval del Centro Democrático, un partido que cuenta con amplios afectos en la ciudad y en el departamento, que hace apuestas incluyentes a todos los sectores ciudadanos que gustan de participar en la construcción cotidiana de las actitudes y los hábitos democráticos.
Admirable el trabajo que ha hecho hasta la fecha Leonidas con nuestra campaña. Los resultados y verdadera foto la conoceremos solo el domingo 27 a las seis de la tarde.
Ha sido una campaña austera, de cara a la comunidad, respetuosa con la ciudadanía. Con bonhomía y buenas maneras, Leonidas ha prodigado una caricia social a los ibaguereños, y hay que decirlo, los ibaguereños sí que necesitan caricias sociales, después de tanto manoseo instrumental a los que se les ha sometido por años y se les quiere seguir sometiendo.
Debo decir que estaré infinita y eternamente agradecido con Leonidas porque, ante instrumentales propuestas que ha recibido para hacer negociados electoreros a las volandas, sigue llevando con pundonor su campaña hasta el final y no ferió su visión de ciudad.
He tenido la oportunidad de participar en procesos políticos diversos, unos que han recibido el mandato mayoritario de los ciudadanos y otros no, pero todos esos procesos han sido ganancia para la vida democrática del país y de la región y para mí en lo personal. Cualquiera sea el resultado el próximo 27 en Ibagué, con la campaña de Leonidas habrá ganado Ibagué, el Tolima y Colombia.
Uno termina en estos procesos políticos entendiendo cómo las encuestas, los sondeos y esas cajas de resonancia que son los medios juegan un papel relevante en las intensas jornadas electorales. A veces aciertan, pero muchas y sonadas veces no aciertan para nada. No olvidemos el plebiscito de 2016; una fue la narrativa de los medios y encuestas sobre lo que iba a pasar con el plebiscito, otro fue el resultado final. ¿Qué aprendimos? Que la gente cada vez más ejerce con independencia y autonomía su voto, cada vez come menos cuento y se hace escuchar, se hace sentir, expresa su mandato.
Claro que las cosas para la campaña que lidera Leonidas López Herrán no serán fáciles en estos días, tampoco han sido fáciles en los días que han transcurrido, nuestra campaña es un elogio alegre para poner cara a las dificultades y es la ciudadanía ibaguereña la que tiene la última palabra.
Leonidas, en política, nos está confirmando que no es un necio más, pues solo el necio, confunde el valor con el precio. Una vez más gracias Leonidas por ayudar a valorar y dignificar la política ibaguereña y tolimense con tu participación. El 28 de octubre Ibagué, si quiere, puede amanecer con un señor Alcalde si elige tu nombre.
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