“Alguien nos llamó diciendo que trabajaba para el Ejército, que la orden era clara, el carro había que pararlo. Que lo que estábamos haciendo estaba mal.”, cuenta Ávila, de 24 años.

Aquella persona se refería al hecho de transportar a algunos manifestantes hasta sitios seguros. Ante el llamado de ciudadanos que deseaban conocer el paradero de sus familiares, en su vehículo, el joven estudiante de Veterinaria recorrió la Calle 80 hasta la Calle 32 y sus alrededores.

 “Muchas personas nos llamaban, nos ofrecieron garajes. Una amiga tenía 15 personas que habíamos resguardado. En la hacienda Piedra Pintada una señora nos prestó un antejardín para tener muchachos allí”, menciona Ávila.

Al parecer, las llamadas aumentaron por dos razones. La primera tenía que ver con una publicación donde Bryan compartía su número telefónico. La última estaba vinculada con la transmisión de su labor.

Al notar que el combustible empezaba a escasear, decidió transmitir en vivo desde su celular a través de Facebook. “Nunca pensé que se iba a volver viral. El apoyo de la comunidad no fue solamente con donaciones de $500, $700, $1000 o hasta $10000 sino con el tema de estar pendiente de nosotros”, explica Bryan.

Tras la transmisión logró recaudar cerca de 250 mil pesos. Asimismo, iniciaron las llamadas y los mensajes donde le advertían que seguían al vehículo. Con temor, Ávila llegó hasta su casa y al día siguiente puso en conocimiento la situación a la Comisión de Derechos Humanos.

Sin embargo, eso no ha impedido que vuelva a las calles a hacer parte de las movilizaciones que se desarrollan en el marco del Paro Nacional. Ahora recibe donaciones de alimentos o bebidas que reparte en las jornadas de marcha.

Mensaje a la ciudadanía

“Nosotros somos pueblo sin importar el uniforme que llevemos puesto. Los derechos que estamos reclamando en las calles son derechos colectivos, no individuales. Esa lucha no es solamente por unos pocos”  

DATO

Aquella noche estaba regulada por un toque de queda. Sin embargo, para ese momento el vehículo tenía un permiso especial para transitar. Luego de lo sucedido, tal permiso ya no fue válido.