Obligados a vigilar Nueva Castilla

HÉLMER PARRA – EL NUEVO DÍA
Afectados por la inseguridad aseguraron que las bandas de atracadores están integradas por jóvenes de la misma urbanización. Así mismo, dijeron que no denuncian ante las autoridades, porque les dan miedo las posibles represalias que puedan tomar contra ellos o sus familias.

Los dos muertos y los múltiples atracos a comerciantes, transeúntes,  transportadores y los hechos violentos durante los tres últimos meses en el barrio Nueva Castilla, obligaron a la Policía a iniciar labores de inteligencia y replantear la vigilancia en la zona.

De acuerdo con el comandante de la nueva Policía Metropolitana de Ibagué, coronel Fernando Murillo Urrego, para desmantelar las bandas que están sembrando el terror en este sector de la comuna Ocho, se necesitará de la denuncia de la comunidad.


Lo anterior teniendo en cuenta que el temor y la zozobra se apoderaron de los moradores, pues según sus testimonios, salir después de las 8 de la noche se convierte en una acción peligrosa.


Aparte de ello en muchas ocasiones sus viviendas han sido tomadas por los  delincuentes como escondite, sin que ellos puedan hacer algo para evitarlo, porque los 'cacos' intimidan a sus vecinos con armas blancas y de fuego.


“Tomaremos el toro por los cachos”
El coronel Fernando Murillo Urrego indicó que su primer objetivo será recuperar la calma en Nueva Castilla y sus alrededores.

“Iniciamos reuniones con nuestro servicio de inteligencia e investigación criminal para conocer de fondo la problemática de Nueva Castilla. Sin embargo, tomaremos el toro por los cachos, porque el objetivo de la Policía Metropolitana es devolverle la tranquilidad a la zona.


“Como primera medida conversaremos con los habitantes de este sector, para posteriormente encontrar soluciones. Dentro de la estrategia también se contempla reforzar la presencia de los uniformados”.


El secretario de Gobierno, Edward Amaya, expresó que si bien es cierto que en las últimas semanas, se capturaron seis personas en Nueva Castilla, estas acciones no han sido suficientes para acabar con la inseguridad que impera allí.


“Esperamos que con la ampliación de 26 a 88 cuadrantes, con las 200 motocicletas que se van a entregar y con la llegada de los mil 100 uniformados podamos mejorar la seguridad no sólo allí, sino en el resto de la ciudad.


“Sabemos que en Nueva Castilla hay un grave problema de inseguridad, pero también existe una problemática social que debe ser tratada”.


Por su parte, el comandante saliente de la Policía del Tolima, coronel Javier Herrera Velandia, mencionó que con la puesta en marcha de la 'Metropolitana' se proyecta una reducción de la delincuencia.


“Aparte del refuerzo en uniformados, llegarán elementos de movilidad, tecnología y recursos logísticos, que una brindarán mayor cobertura y mejor servicio a la ciudad. En Nueva Castilla desde hace tiempo hicimos trabajos de inteligencia y gracias a ello se lograron importantes capturas por robo y microtráfico, no obstante algunos sujetos continúan con su actividad delictiva”.


“El vía crucis”
Una tortura se convirtió para los habitantes de Nueva Castilla abordar una buseta. Para llegar a La Esmeralda, el nuevo paradero de las rutas de servicio público, las personas deben caminar 20 minutos.

Este es el caso de Fanny Castellanos, una de las residentes de dicha urbanización. “En Nueva Castilla estamos viviendo un infierno, porque el barrio se llenó de ladrones. Los delincuentes hacen de las suyas a toda hora del día, pero en especial en la noche. La situación es tan grave que después de las 8 de la noche, uno no puede salir a las calles, porque aquí impera su ley.


“Si uno sale a esas horas sabe que está expuesto a ser robado o a que lo amenacen con armas de fuego, pues ellos ya no utilizan navajas ni cuchillos”.


Los otros afectados son los conductores de buseta, a quienes se les ha disminuido el número de pasajeros. Sin embargo, ellos se resisten a efectuar la ruta completa hasta tanto no se normalice la seguridad.


“La situación estaba muy tensa, pero los delincuentes se descararon porque, además de robarnos, estaban hiriendo a los compañeros. Nosotros no vamos a prestar el servicio hasta Nueva Castilla, si la Policía no mejora la seguridad”, mencionó Guillermo Sánchez, control de la empresa Cotrautol.


Credito
ANA LUCÍA RIVERA Q.

Comentarios