El alcalde Luis H. Rodríguez tiene abierta la posibilidad de que el tránsito en la ciudad sea manejado bajo un modelo de guardas civiles.

La movilidad hoy en Ibagué está en manos de la Policía, bajo una serie de convenios de apoyo institucional.

“Siempre dije que la Policía me genera confianza y tranquilidad, pero en las diferentes reuniones y recorridos por los barrios han insistido mucho en que vuelvan los guardas de tránsito particulares”, afirmó.

Precisó que no tomará medidas sólo por “complacencias” y pedirá al comando de la fuerza pública que revise el esquema, pero que se le dé tranquilidad al respecto.

“Con la Policía Metropolitana podemos garantizar más pie de fuerza dedicado a la Vigilancia.
“También estamos pensando en cámaras que vigilen y controlen a los infractores y que no le corresponda esta tarea a la Policía”, comentó.

Al preguntársele al burgomaestre si descarta, entonces, la introducción del sistema de guardas de tránsito, contestó que, en principio, “sí”.

“Voy a reunirme con la Policía a exigirle que analice el tema, lo revisemos, y escuchen las quejas e inconvenientes que han llevado a muchos ciudadanos a no creer en la Policía.

“Necesitamos recuperar la confianza y la credibilidad en las autoridades policivas y para eso le estamos dando todo el apoyo. Lo que la gente quiere es que haya tranquilidad, si la Policía no la está garantizando, revisémoslo”, afirmó.

Luis H. Rodríguez advirtió que en caso de que en el futuro no se corrijan las quejas, entraría a estudiar “otras alternativas”.

EN SÍNTESIS
La discusión sobre los guardas de tránsito no es nueva en Ibagué. Se tocó el tema en 2008, debido a las anomalías que se presentaron con la totalidad de agentes encargados de la especialidad en la ciudad, más de 40.

La Secretaría de la época elevó la denuncia formal, pero en noviembre se conoció que la investigación de las irregularidades la archivó la Justicia Penal Militar, sin encontrar ningún responsable.

No obstante, la anterior Alcaldía le recomendó al nuevo Gobierno local que mantuviera el convenio con la Policía.
El hasta 2011 secretario de Tránsito, Alfonso Pineda, expresó antes de dejar el cargo que era conveniente seguir con el esquema, por razones como la autoridad de la que están investidos los agentes, que inspiran respeto.

De otro lado, hay aspectos que cortarían de tajo la posibilidad de crear la guarda de tránsito en Ibagué, como por ejemplo el costo que implicaría no sólo el pagarle un salario digno a estos funcionarios, que los blinde de los sobornos, sino el precio alto que implica su capacitación, dotación y medios de transporte que necesitan.