Dieciocho personas afectadas y veinte casas inundadas por el desbordamiento de la quebrada Chipalo, fue el saldo reportado por las autoridades locales durante el 'puente festivo'.

La principal emergencia se registró en la parte alta de los cerros noroccidentales, allí cinco casas de Alaska sufrieron afectaciones; mientras tanto en el barrio Santa Cruz se presentó un deslizamiento en masa que causó daños materiales, pero no dejó víctimas.

De acuerdo con el reporte entregado por la Secretaría de Gobierno y el Cuerpo Oficial de Bomberos, la falta de cultura ciudadana sigue siendo el causante de estos hechos, pues los 'box coulvert' y el sistema de alcantarillado se encontraron llenos de desechos sólidos.

“Las causales de estas emergencias comienzan por la falta de cultura ambiental de quienes residen en estos sectores, pues después de una limpieza en las cajas del alcantarillado se hallaron llantas, colchones, juguetes, tarros, ropa y calzado.

“En la palizada que inundó las casas de Alaska había restos de especies vegetales, por lo que presumimos que las personas están talando los árboles.

“Nosotros vemos la necesidad de iniciar un proceso de prevención con la comunidad para evitar este tipo de desastres, porque los habitantes tienen derechos pero también deberes”.

El Comandante de Bomberos, capitán Rafael Rico indicó que una de las familias afectadas por el Chipalo en Alaska, fue reubicada en un albergue temporal.

“Hacemos un llamado de atención a los ciudadanos, pues en la parte alta del cerro se sigue deforestando y no hay un buen manejo de las microcuencas.

“Esto hace que cada vez que llueve haya mucho material de arrastre que tapona y desborda las quebradas.

“La otra situación que tenemos es que donde se han hecho obras de mitigación, las personas no tiene precaución y arrojan desechos allí, que a su vez taponan las cajas que canalizan los afluentes”.

Los afectados
Felicita Sánchez Cerquera, residente de Alaska es una de las afectadas por los estragos del Chipalo.

Su casa de inundó y algunos enseres como electrodomésticos y muebles se le dañaron. Sumado a ello la tubería de aguas negras se taponó.

“El equipo de sonido, una ropa y unos muebles se me dañaron por el agua – barro que nos inundó.  

“Aparte de ello nos quedamos sin servicios porque las redes del alcantarillado colapsaron.

“Gracias a Dios la emergencia no fue peor, pues al momento de la inundación mi hija estaba sola con mi esposo.

“Nosotros estamos preocupados, pues tenemos miedo de que vuelva a llover duro y el gua haga estragos.

“Esta es la primera vez que nos pasa algo así, pero en el barrio donde vivíamos antes nos pasó lo mismo varias veces, por eso nos salimos de allá. Queremos pedirle al Gobierno local que nos tenga en cuenta para una reubicación”, sostuvo Sánchez.

Nelly Calderón, otra de las damnificadas comentó que varios de sus objetos materiales se perdieron por efecto de la inundación.

“Nosotros estábamos aquí en la casa y de un momento a otro, el agua se entró por el comedor y la cocina taponándonos todo”.

Doris Molina Rubio, vicepresidente de la Junta de Acción Comunal de Alaska mencionó que esta no es la primera vez que se registra una emergencia de este tipo, por ello le pidió a las autoridades que destinen más recursos en obras de mitigación ambiental.

“Desde el 8 de abril de 2009, cuando tuvimos una emergencia parecida estamos detrás de los organismos de atención para que protejan la quebrada del Chipalo, pues para nosotros este afluente siempre ha sido una amenaza”, concluyó Molina.

En la zona rural
El secretario de Desarrollo Rural, Ramiro Arciniegas Lastra informó que la vereda El Gallo (Chapetón) y el corregimiento de Tapias son hasta el momento los más afectados por la ola invernal.

En estas zonas los deslizamientos de tierra han taponado las vías de acceso. No obstante, el Municipio envió maquinaria para atender la emergencia.

“Hemos estado pendientes de los sectores rurales donde se han registrado taponamientos en el carreteable.
“En la vereda El Gallo y Toche tenemos maquinaria de la Secretaría para tratar de limpiar las vías por los derrumbes.
“Hasta el momento no se han presentado desbordamientos de quebradas en la zona rural, todas las emergencia han sido ocasionadas por saturación de los suelos, a raíz de las lluvias.

“Esperamos que el invierno cese un poco con el fin de que podamos adelantar acciones de mitigación”.