Una prótesis PIP (Poly Implants Prothéses) estuvo a punto de arrebatarle la vida a una ibaguereña, de 43 años, luego de que estallara dentro de su cuerpo.
Tras superar su dura batalla, que incluyó la extracción y cambio de las prótesis mamarias, Clarena Alfonso, insta a las mujeres que se aumentaron los senos con estos implantes franceses a que se los retiren.
“Hace tres años me hice la cirugía, quise hacerlo porque después de tener a mis hijos, mis senos me quedaron muy caídos.
“Inicialmente yo quería un levantamiento de las mamas, pero el cirujano me recomendó que me pusiera prótesis.
“Infortunadamente, al momento de la consulta el médico nunca me mostró un catálogo o me indicó qué clase de implantes me iban a poner; así como tampoco me entregó la garantía de las prótesis, después de la cirugía”, comentó.
“Me dejé tentar”
De acuerdo con el relato de Clarena, en la escogencia del médico que le practicaría la cirugía, primaron las sugerencias de sus amistades.
Así mismo, sostuvo que a los tres meses de haber sido implantadas las prótesis, empezó a sentir fuertes dolores en el seno derecho; por lo que cada año se practicaba ecografías.
“Los dos primeros años las ecografías fueron normales, pero con el examen que me practiqué en diciembre me indicaron que tenía una contractura capsular en el seno derecho, la cual nunca me molestó, pues yo siempre consultaba por mi seno izquierdo.
“El radiólogo me sugirió que me hiciera una resonancia magnética, entonces fui al ginecólogo para que él me transcribiera la orden para dicho examen y fue así como me confirmaron que me tenía que retirar los implantes”.
Una vez le confirmaron el dictamen, Clarena decidió consultar al cirujano Armando Peña, pues los dolores en las muñecas, dedos, articulaciones y el brazo izquierdo eran “insoportables”.
“Mi salud empezó a empeorar, pues me sentía todo el tiempo cansada, me dolían el brazo, los huesos, los dedos me amanecían engatillados; en un comienzo pensé que estaba sufriendo de alguna enfermedad, pero según las explicaciones del doctor Peña, era por el daño en la prótesis.
“Afortunadamente y gracias a Dios, el doctor Armando me extrajo los implantes PIP, todo salió muy bien, pero ellos me mostraron las prótesis que me habían retirado y lo único que hice fue llorar, pues era increíble ver la clase de elementos que me habían puesto”.
La paciente aún desconoce los motivos y la fecha en la cual se estalló uno de sus implantes; sin embargo el líquido amarillo que los médicos encontraron en su organismo fue enviado a patología.
“Creo que los exámenes y la cirugía se hicieron a tiempo, pues no se encontraron rastros de tejido necrosado.
“Yo invito a las mujeres que tengan implantes PIP a que vayan al médico, se practiquen ecografías y se los retiren.
“También les aconsejo a las personas que antes de practicarse una cirugía, se cercioren de que el médico que les va a practicar la intervención tiene las condiciones; pues quien me puso las prótesis PIP no era cirujano plástico”, concluyó la paciente.
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