EL NUEVO DÍA: Se habla de un supuesto pleito que tendría con Ecos del Combeima. ¿Esto es real?

ENRIQUE MEJÍA FORTICH: No tengo ni un pleito, ni una pelea con Econoticias, no tengo pelea casada con nadie; simplemente lo que he dicho y estoy invitando es a los empresarios, a la institucionalidad de la ciudad, a las empresas que hoy trabajan por hacer de esta región más grande, a que miremos desde una perspectiva responsable el periodismo que se está haciendo desde ciertos sectores, y si vamos a seguir en manos de un periodismo que aquí todo el mundo sabe y lo habla, de que es un periodismo que se ha montado sobre la base de extorsionar, de decir mentiras, de descalificar, del chisme, para después ir por la puerta de atrás a pedir la pauta a quienes se lo han hecho.

Todo el mundo lo sabe y he puesto un dedo sobre la llaga en ese tema, entonces entiendo que deben estar molestos, porque he dicho que hay un periodismo de ‘traganíquel’ que no le conviene a la región, tenemos que buscar cómo reivindicar y edificar esa profesión que tiene muchos profesionales jóvenes, y algunos amigos también de la vieja guardia han ejercido un periodismo respetuoso, obviamente denunciando cuando se debe, planteando problemas críticos, cuando hay algo que criticar, pero no de chantaje ni de extorsión, que es muy diferente al periodismo que informa y denuncia.

E.N.D.: Y entonces, en Ecos se sintieron aludidos...

E.M.F.:  En una reunión algún día, sí mencioné y di un ejemplo de ese caso, del típico periodismo del señor Juan Pablo Sánchez. Aquí no podemos llamarnos a engaños en algo que todo el mundo dice, que el padre de ese periodismo extorsivo está en Econoticias, esta es una historia que en la calle la comentan, yo lo digo porque lo oigo de los amigos, es ‘vox populi’ en la ciudad, que el señor Arnulfo Sánchez hizo dinero, según dice la gente, extorsionando a la clase política y a empresarios.

Hay un grupito de periodistas afortunadamente pequeño, que ha utilizado ese sistema de chantajear, del chisme, para poder ir tras la pauta comercial, y como no le he jalado a eso, lo he denunciado, están bravos, están pataleando y están inventando cosas traídas de los cabellos, y finalmente cuando salen a decirte una u otra cosa, no tienen argumentos.

E.N.D.: ¿Qué es en lo que le han calumniado?

E.M.F.: La verdad poco los oigo, a veces alguien me dice ‘hoy le tocó que lo premiaran en Ecos del Combeima o en las otras’, con una sarta de ofensas que a mí no me preocupan, mi trayectoria la gente la tiene clara, las personas que están alrededor mío, que me conocen, generalmente ni oyen esas emisoras; pero hay gente que me dice ¿qué les ha dicho o cuestionado?, porque están furiosos, y creen que con ofensas y atacándome me van a callar. Por el contrario, me están dando insumos para iniciar una campaña que voy a promover, de depurar el periodismo local.

Vamos a trabajar en traer conferencistas, gente que hable al periodismo que está haciendo las cosas bien y hablar sobre lo que hay que hacer; pienso en el ejemplo a muchachos periodistas que están empezando, y en algunos que llevan la trayectoria de una carrera, y cuando ven a tres o cuatro periodistas del chantaje y la extorsión, andando en carros último modelo y en casas tipo mansiones, dirán que lo que paga es hacer chantajes, extorsión, periodismo malintencionado, y el que hace las cosas bien debe subsistir para ejercer la profesión con dignidad y respeto, eso hay que acabar, ese periodismo que hacen algunos con apodos: el señor ‘La Vaca’, o el señor ‘Tapeto’.

E.N.D.: ¿Lo que está proponiendo no podrían interpretarlo como boicot o veto? ¿De qué se trata?

E.M.F.: No, ellos lo quisieron poner como un veto. Propongo en general que los empresarios, la institucionalidad no solo los privados, sino también los públicos, miren dónde ponen la pauta, y que lo hagan de manera responsable en función de sus intereses, pero no de que los chantajeen para que no estén hablando mal de ellos.

Esto lo digo a nivel general, si los señores de Econoticias se sienten aludidos, y si hacen ese periodismo allá ellos; estoy proponiendo a los sectores privados y públicos que salgamos de ese periodismo de traganíquel, del chantaje, de la extorsión, hagamos un periodismo serio y hay con quién hacerlo, hay medios suficientes en la ciudad para que la pauta se coloque en el periodismo con responsabilidad, es eso estoy proponiendo, y no es un veto puntual.

E.N.D.: ¿Por esto se ha dado algún bloqueo desde la Cámara de Comercio o desde la Universidad de Ibagué, donde usted tiene cierta influencia?

E.M.F.: No sé si se ha dado o no, lo cierto es que ha sido una posición abierta que he tenido en mérito, otra cosa son los directivos de las empresas; simplemente estoy enviando el mensaje, si creen que es válido y han tomado medidas, me parece excelente, sino, pues listo, seguiremos en este tema, porque  creo que ha faltado alguien que le diga a esos medios la verdad callejera, lo que se dice en la calle, o en reuniones con empresarios, ya que ese tema es claro, lo dicen, lo mencionan, cuentan anécdotas de cuando los han extorsionado y cómo, entonces no es un chisme.

E.N.D.: Su relación con EL NUEVO DÍA es reconocida, y uno de los ataques que han hecho es que usted desde algunas posiciones como la Cámara de Comercio, habría favorecido a este periódico... 

E.M.F.: Cuando fui presidente de la Junta Directiva de la Cámara de Comercio, fue un ánimo exclusivo de que todo lo respectivo lo dejé a quien estaba encargado de la Presidencia Ejecutiva y lo hizo, no sé cuánto le dieron al uno o al otro, no intervine en eso porque no era mi interés y no tenía por qué hacerlo;  además no han podido mostrar un contrato, convenio o un hecho que diga que por mi influencia se favoreció EL NUEVO DÍA: no lo hay.

Han llenado la Cámara de Comercio de derechos de petición, el Presidente Ejecutivo todos los días recibe una nota pidiendo que diga cuánto es la pauta, y ahí está la información; pero ellos son los que tendrían que justificar eventualmente cómo es que acceden a cierta pauta a través de las prácticas que todos sabemos que manejan.

E.N.D.: ¿Hay algún acoso hacia la Cámara de Comercio en este sentido?

E.M.F.: Ellos quisieron cooptarse a la Cámara de Comercio y ponerla a su servicio, pero ni la junta ni el Presidente Ejecutivo se han dejado manosear de esos medios, y espero que no se dejen.

E.N.D.: ¿Cuál ha sido el respaldo de sus compañeros de la Cámara ante esta controversia?

E.M.F.: Ha sido absoluto, quiero agradecer a los compañeros de la Junta Directiva que ante los ataques y comentarios salidos de tono y mentirosos, han sido solidarios absolutamente conmigo, unánimemente he recibido ese respaldo; además saben que no he actuado, ni hablado a nombre de la Cámara de Comercio, porque no tengo la autoridad ni el mandato para representarlos, como tampoco lo tengo de la Universidad de Ibagué, o de cualquier otra institución en la que pertenezca, lo hago es como ciudadano independiente, así esté en la Fundación Musical o en cualquier otra institución.                   

E.N.D.: A propósito, también se ha dicho que usted habría incidido en sacar al periodista Mauricio Vargas de la presentación de los eventos del Festival Folclórico Colombiano. ¿Es cierto?

E.M.F.: Hay gente que se cree dueña de las instituciones y los eventos; el señor Vargas, ‘La Vaca’, creo que le dicen, se sentía dueño y señor de ciertos eventos. Las instituciones cambian, se renuevan, y hubo un cambio que fue absolutamente beneficioso, un nuevo presentador, una nueva cara, una nueva imagen; pero autoproclamarse el mejor presentador del Tolima, que es lo que viene haciendo: ‘somos los mejores’, ‘somos los más impolutos’, ‘el decano’, ‘somos los transparentes’, cuando todo el mundo sabe los antecedentes.

Es muy fácil cuando tengo un micrófono que es mío y salir a echarme toda clase de alabanzas y presentarme como una buena persona, pero la historia está escrita; por ahí hay un libro de un periodista hermano de otro periodista que denuncia y muestra toda la suciedad que hay detrás de ciertos medios de comunicación en la ciudad, y lo dice un periodista con valor moral haciendo autocrítica al periodismo local, eso está escrito; lo que pasa es que no ha habido valor civil para enfrentarlos y decirles ‘no, señores, ese no es el periodismo que queremos’.

E.N.D.: ¿Cómo ve la posición que ha tomado la Alcaldía frente a la pauta publicitaria para los medios, en especial para la radio?

E.M.F.: La respeto mucho y no soy quién para decirle al Alcalde que haga o no haga. Él tomó una decisión y la estará ejerciendo, no sé cuánto les ha dado, pero parece que les está tallando, que no les está gustando y entonces hablan mal del Alcalde. Respetable la posición, se necesita valor civil para asumir situaciones de este estilo.

E.N.D.: Sobre la propuesta de traer expertos sobre ética periodística, ¿ya tiene algo estructurado? ¿Se haría a través de la Cámara de Comercio, o con quiénes? 

E.M.F.: No, a la Cámara no la puedo involucrar en estos temas y no tengo la facultad para hacerlo, pero hay muchos medios, hay institucionalidad en la ciudad; hay personajes de la vida nacional que todos los días hablan de ética, de principios en el periodismo como en todas las actividades de la vida, entonces creo que hay que promoverlo; vamos a ver quién se anima a trabajar en este tema, y buscar a esos personajes.

Pero también decir a quienes manejan los recursos y colocan la pauta que lo hagan responsablemente, buscando el perfil de las necesidades del producto, o de lo que quiere posicionar, pero no con base a la espada del chantaje y de la extorsión, porque seguramente en cualquier momento podrían venirse encima con una andanada de mentiras.

E.N.D.: El gerente de Ecos del Combeima hizo referencia, en un programa de televisión local, de que usted había usado entidades como la ADT para favorecerse desde ahí. ¿Es cierto?

E.M.F.: Es lo más ridículo, es la típica calumnia, el típico argumento sin sustento decir que me he aprovechado de contratos, de convenios y de estudios para favorecerme y enriquecerme; muéstrenme un estudio, convenio, un contrato que haya hecho en esa función. Tengo una actividad profesional y la ejerzo en seguros, por lo tanto licito en lo público, algunas veces he ganado, otras perdido, pero ya, nunca he extorsionando a alguien, ni tenido un convenio o contrato institucional a título personal con alguna institución, que lo demuestren.

Soltar al aire que me he enriquecido con convenios y contratos, es fácil decirlo, pero la gente que está al lado mío sabe cómo son las circunstancias de la vida, cómo he vivido y de qué, ahora vienen a hablar de mi papá, quien fue un hombre absolutamente transparente e impoluto, y lo dice la sociedad ibaguereña en general.

Pero no es lo mismo que dicen del papá del señor Sánchez, es una gran diferencia entre liderazgo y la respetabilidad que mi papá como personaje público fue, a lo que fue el señor Arnulfo Sánchez, muy lejos y muy grande.

E.N.D.: Algunos funcionarios públicos han anunciado denuncias contra periodistas por sentirse calumniados. ¿Usted ha considerado instaurar alguna acción jurídica por el mismo motivo? 

E.M.F.: No vale la pena, creo que no he perdido mi nombre ni nada, finalmente me han hecho un favor de ponerme en un escenario que no estaba buscando, aunque no estoy tras reconocimientos, ya que el trabajo que hago en las distintas instituciones lo hago tranquilamente, sin aspavientos, sin nada; pero me han dedicado un gran tiempo valioso de sus emisoras para injuriar y traer personajes trasnochados que han estado como funcionarios públicos y se bajan sin explicar en qué se gastaron los recursos públicos. Después aparecen, como el señor Bejarano, a decir no sé qué, o el señor Levy que es exiliado hace muchos años, que salió de EL NUEVO DÍA no por mi influencia, sino que fusiló textualmente las columnas del señor Carlos Alberto Montaner, un escritor de Miami, para publicar algo que era exactamente igual; ¿ese es el periodismo que queremos?, y por eso vive exiliado.

Es que aquí ya la gente no les cree los cuentos; yo no me tengo que exiliar, aquí vivo, tengo mi familia, a mis hijos, hago mis actividades diarias, salgo a caminar por la Tercera y no me escondo. 

Lo que sucede es que todo el mundo vive arrinconado ante los micrófonos que afilan sus baterías; yo vi en la administración pasada que hablaron mal del Alcalde de turno, pero un buen día hubo una entrevista radial del señor patriarca Arnulfo Sánchez al Alcalde, ensalzándolo, alabándolo, subiéndolo y bajándolo, diciendo que había partido la historia de Ibagué, que era lo mejor que había pasado por esta ciudad, después de que lo habían presionado; una moneda mágica que llegaría seguramente por el traganíquel, ahora ellos dicen que denuncian, pero que saquen la grabación donde lo ensalzaron.