El reconocimiento ayer por parte del Eln de la autoría del atentado terrorista contra la Escuela de Cadetes de la Policía General Santander, en el que perdieron la vida 21 personas, precipitó una serie de reacciones a nivel nacional e internacional, que han planteado debates en diferentes frentes.
Por un lado, la atribución por parte de esta guerrilla del ataque dio elementos que reforzaron la postura del Gobierno nacional de no reconocer los protocolos suscritos entre el Gobierno Santos y el Eln y el pedido a Cuba de capturar y extraditar a los diez negociadores de este grupo guerrillero que permanecen en la isla.
Por otro lado, se escucharon voces desde el plano multilateral que condenaron el ataque y que piden llevar ante la justicia a los responsables del atentado contra la Policía.
En medio de esto, está la indignación ciudadana, que se manifestó en parte en las marchas del pasado domingo contra el terrorismo que se llevaron a cabo en todo el país, y el fortalecimiento del discurso militar que ya se percibe para enfrentar a la guerrilla del Eln.
Sobre los protocolos
Uno los temas de mayor discusión ha sido el anuncio que hizo el Gobierno de desconocer los protocolos pactados entre la administración de Juan Manuel Santos y el Eln.
El alto comisionado para la Paz, Miguel Ceballos, aseguró que frente al acto terrorista del pasado jueves no hay protocolos que valgan. “Aquellos que han hablado de unos protocolos, quiero decirles que no hay ni puede haber ninguna decisión que se tome por encima del Consejo de Seguridad de la ONU. No hay ninguna justificación”.
Para el analista político Jorge Iván Cuervo, si bien el Gobierno no había enviado negociadores, estaba exigiéndole al Eln liberar los secuestrados y gestos de paz con el propósito de reiniciar los diálogos, y por tanto estaba reconociendo que había una mesa de paz entre el Estado y esa guerrilla, así como los protocolos pactados.
Sin embargo, agrega el experto, cuando el Eln comete el atentado contra la escuela de Policía, el Gobierno encuentra una oportunidad para reconducir su agenda en materia de negociación y de paz y por eso toma la opción de exigirle a Cuba que entregue a los negociadores sin hacer caso a los protocolos.
Por su parte, el experto en política Jhon Mario González señala que la postura de Iván Duque le sirve para reafirmar su imagen en el plano nacional. Dice que su posición exacerba los sectores que lo han apoyado desde el principio y también para replantearse ante la opinión pública.
Además, advierte que esta postura del presidente también le podría traer riesgos a mediano plazo, debido a que podría exagerar la expectativa en la ciudadanía y si no cumple a nivel de seguridad, la opinión pública puede cobrárselo más adelante.
La declaración del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que condenó el atentado “en los términos más enérgicos posibles” e insistió en la necesidad de llevar ante la justicia a quienes perpetraron, organizaron, financiaron y patrocinaron este ataque, también suscitó la reacción de diferentes sectores, entre ellos el Gobierno nacional, que argumentó su postura en lo dicho por el organismo multilateral.
Para Arlene Ticker, profesora de la Universidad del Rosario, es una reacción lógica la manifestada este lunes por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que busca condenar una acción terrorista.
“En general, sigue habiendo en la comunidad internacional un fuerte respaldo a una salida negociada al conflicto colombiano en lo que concierne al Eln”, considera la analista.
Además, Ticker opina que la exigencia de que se desconozcan los protocolos acordados entre el Estado colombiano y otros estados garantes es un mensaje negativo para que a futuro distintos países se ofrezcan a desempeñar ese papel.
Con la docente coincide Rafael Piñeros, coordinador de Relaciones Internacionales de la Facultad de finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales de la Universidad Externado, quien resalta que el Consejo de Seguridad siempre saca comunicados rechazando actos terroristas en este sentido.
“Esto no es ni más ni menos de lo que ha hecho antes, el efecto jurídico es el mismo, simplemente fue un comunicado”, opina el docente, quien agrega que “la comunidad internacional nunca va a buscar una cosa distinta a una solución negociada al conflicto”.
Duque pide a Venezuela una respuesta
El canciller colombiano, Carlos Holmes Trujillo, pidió ayer una “respuesta concreta” a Venezuela sobre si hay o no miembros de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (Eln) en su territorio, pues considera que el Gobierno de Nicolás Maduro ha tenido “posiciones evasivas” frente al tema.
“Aprovecho esta oportunidad para reiterarle al Gobierno de Venezuela que estamos pendientes de la respuesta concreta con respecto a la presencia o no de miembros (de esa guerrilla) en su territorio”, afirmó Trujillo en una rueda de prensa.
Autoridades colombianas aseguran que varios jefes del Eln se refugian en Venezuela y que en ocasiones los guerrilleros atacan a la Policía, la población civil, el Ejército, o la infraestructura eléctrica y petrolera y luego se esconden en el país vecino, cosa que ese grupo niega tajantemente.
Rechazo político y ciudadano
El atentado del pasado jueves contra la Policía también despertó la reacción de los ciudadanos, miles de los cuales marcharon el pasado domingo contra el terrorismo.
Si bien la marcha se organizó en dos días, luego del ataque perpetrado por el Eln, la movilización estuvo muy lejana en apoyo a la que se vivió en febrero de 2008, cuando más de un millón de personas salieron a protestar contra los actos violentos de las Farc.
En concepto del analista Jhon Mario González, la situación es aún confusa. “Sin duda, el terrible atentado y la marcha del pasado domingo le sirven como vitamina política al Gobierno, pero no estoy seguro de que haya sido tan contundente y la vitamina le alcance, le clarifique la falta de dirección, pero sí pone de presente que la seguridad puede ser el tema sobre el que gire el Gobierno”.
Un reto para las fuerzas militares
El otro punto de discusión está en el campo militar, donde es claro que se viene una ofensiva por parte del Gobierno nacional y las Fuerzas Armadas para combatir al Eln.
Aunque los expertos en temas de conflicto y seguridad consideran que esta guerrilla tiene una forma de lucha distinta a la de las Farc, reconocen que tienen una capacidad importante de hombres, estimada por algunos en 3.500 militantes, que se mueven constantemente en las zonas en donde tienen presencia, entre ellas la frontera con Venezuela, lo cual dificulta atacarlos militarmente.
El ministro de Defensa, Guillermo Botero, ha dicho tras el atentado que las Fuerzas Militares tienen la capacidad de combatir al Eln ahora que no se continuarán los diálogos de paz, pero reconoce que no hay que menospreciar la capacidad del grupo subversivo.
Por su parte, el comandante del Ejército Nacional, general Nicasio Martínez, destaca que sus hombres tienen la experiencia y conocimientos para emprender una ofensiva contra el Eln. Además, asegura que durante las conversaciones de paz los combatientes de este grupo subversivo se incrementaron.
Dato
El Eln admitió en un comunicado publicado en su página de Internet, que fue el autor del ataque del pasado jueves contra la Escuela de Cadetes General Santander.
Dato
Pese al atentado, el grupo guerrillero invita al presidente Duque a que envié su delegación de negociadores a La Habana, para continuar con el diálogo de paz.
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