Orozco está en lo correcto

Más allá de las normas y directrices que intentan ordenar el territorio, el Tolima tiene una característica muy particular, es un departamento bisagra, siendo esto una de sus mayores fortalezas.

Su ubicación le permite relacionarse con la gran mayoría de regiones de Colombia; como una puerta que se abre al occidente del país atravesando la cordillera central por Herveo, Cajamarca, Roncesvalles y Rioblanco; al sur de colombia por Planadas, Alpujarra y Natagaima; y al centro por Flandes, Icononzo, Melgar y Honda.

Esta situación le ha servido al departamento para hacer parte de diferentes iniciativas de regionalización; recientemente las regiones Centro-Sur-Amazonía propuesta en el plan de desarrollo 2010-2018; la región RAP Central propuesta en el actual Plan Nacional de Desarrollo; la ecoregión propuesta por las corporaciones autónomas regionales; y en un pasado no muy lejano, el corpes centro-oriente en donde hacíamos región entre otros con los santanderes.

Con relación a los tres departamentos del eje cafetero, quienes tradicionalmente han trabajado con los paisas, se han conformado en una RAP sin antioquía, y este último departamento está conformando una región con Córdoba y Sucre llamada la fraternidad. No me imagino a los paisas planteando el dilema de trabajar con sus antiguos aliados o con los nuevos, lo hace con todos.

¿Por qué digo que Orozco está en lo correcto? Porque el DNP está impulsando la estrategia del sistema de ciudades para alcanzar mayores niveles de crecimiento y desarrollo económico y trabajar con el eje cafetero le ofrecería nuevas oportunidades a Ibagué y al Tolima.

Se estima que en 2050 el 85% de los colombianos vivirán en ciudades, Ibagué será una de esas ciudades por lo que está hace parte del sistema como una ciudad nodal, por ahora sin un subsistema aliado, el reto es sumarla a otros subsistemas, el Eje cafetero es uno de ellos y el túnel de la Línea es la obra articuladora.

Así que, aunque el túnel de la Línea tiene un evidente propósito logístico entre el puerto del Pacifico y el mercado de Bogotá, haciendo más competitivo el sector de las importaciones, también reduce las distancias entre la ciudad uninodal de Ibagué con el subsistema de ciudades del eje cafetero, este solo hecho es suficiente para validar la propuesta de Orozco. Lo importante es superar la propuesta y establecer con rapidez la solicitud a la Rap cafetera y proponer integrar el sistema de ciudades con Armenia, Pereira, y Manizales.