Así lo informó el gerente del Ibal, José Alberto Girón, quien recalcó que el aumento obedece a la resolución 735 expedida por la Comisión de Regulación y Agua Potable que permite a todas las empresas públicas de acueducto del país reajustar su marco tarifario.

Por disposición del Gobierno nacional las empresas deberán entregar la documentación y el nuevo modelo a más tardar el 30 de junio a la CRA para que pueda entrar en vigencia el primero de julio.

Según José Alberto Girón, desde hace nueve años no se establecía un nuevo incremento de tarifas en el país, en el caso de Ibagué solo se ha venido haciendo el reajuste anual del incremento con base en el IPC.

Cómo lo afectará

Según el directivo el costo fijo y el variable tendrán una variación en la factura que podría verse traducido en un valor adicional de entre cinco mil y seis mil pesos.

“Creería yo que un usuario que paga hoy en tarifa media 32 mil pesos puede resultar pagando 38 mil pesos”.

De acuerdo con el Gerente, la empresa a la fecha viene facturando el metro cúbico (cargo variable) a 672 pesos con el nuevo marco tarifario podría ascender entre los 850 y 900 pesos, teniendo como tope máximo los 950 pesos.

El cargo fijo que a hoy está en los cinco mil pesos, sin importar el estrato podría tener un incremento de 600 pesos.

“Nosotros ya hicimos las modelaciones y se estaría pasando de 672 pesos a entre 850 y 900 pesos el metro cúbico variable, el cargo fijo sube muy poco, estaríamos hablando de cuatro mil 900 a cinco mil 400 pesos, de todas maneras las tarifas siguen siendo competitivas, porque así lleguemos a 920 y 950 pesos que es el tope máximo, lo que cobra hoy Neiva que es de mil 100 pesos y Manizales de mil 200 pesos están por encima, pero aún estaríamos con un rezago tarifario, esto nos implica que hay que ser más eficientes”, indicó Girón.

Los beneficios para el Ibal

Según Girón con el nuevo marco tarifario la empresa proyecta ingresos superiores a los 300 millones de pesos mensuales que permitirán a la empresa entrar a invertir en obras.

Pero podría alcanzar los 600 millones siempre y cuando el usuario no contraiga su consumo promedio que es la generalidad cuando se hace un aumento en la tarifa.

“Esto tiene un fenómeno económico y es que aspirábamos a recuperar 600 millones de pesos más, pero la respuesta que da el usuario cuando usted sube la tarifa es que consume menos, si consumía 17 metros cúbicos al mes dirá consumo 14, porque tengo que pagar lo mismo, pero tengo que consumir menos. Lo que hemos mirado en ciudades similares como Pereira, Popayán y Pasto donde subió la estructura tarifaria lo que hace la gente es recogerse, se contrae la demanda pero nosotros estamos siendo muy conservadores y estamos hablando de no hablar de más de 300 millones de pesos mensuales, porque lo demás sería hacer una burbuja inflada de la economía de la empresa que no nos permitiría crecer adecuadamente”, señaló.

La inversión

Según cuentas hechas por el Ibal para renovar la red de alcantarillado se requieren 307 mil millones de pesos y el presupuesto del Ibal solo es de tres mil millones de pesos.

Lo que se espera con el nuevo recaudo es entrar apalancar nuevas obras con los recursos que se recolectarán vía tarifaria.

“Tenemos que entender también como usuarios, que los sistemas de acueducto y alcantarillado se sostienen por la tarifa”, enfatizó Girón.

Sin embargo, indicó que el incremento no afectará gravemente el bolsillo de los estratos Uno, Dos y Tres que tienen subsidios que el Gobierno nacional gira al Municipio a través del Sistema General de Participaciones.

“Los costos para uno y otro en los estratos bajos no va a superar los ocho mil o los seis mil pesos y recordemos que el estrato Uno está subsidiado en un 65 por ciento, digamos que el impacto no va ser muy fuerte para el bolsillo del usuario”, concluyó el Gerente del Ibal.