Jorge Solano, propietario del asadero Tolipollos, se unió a la manifestación que aunque espera reunir entre 500 y mil comerciantes, el número no superó los 100.
“Es un decreto que traen de Bogotá y quieren aplicarlo acá en el espacio público y los negocios en Ibagué prácticamente todos tienen su terraza, eso es incrementarle el arriendo a uno porque si van a cobrar por metro cuadrado, qué pasa, se puede elevar a $500 mil el arriendo y tocaría suspender un empleado para poder sustentar el pago del impuesto”, dijo el empresario.
Fenalco ya había expresado su negativa de apoyar cualquier tipo de manifestación o vía de hecho a raíz de esta convocatoria.
Para Solano, Fenalco y la Cámara de Comercio “no se quieren comprometer” por las alianzas que tendrían con la Administración municipal.
“A Fenalco y la Cámara de Comercio uno se afilia, pero ellos tienen compromisos con la Alcaldía. Ellos nos apoyaron hasta rebajar el impuesto al 75 %, pero nosotros no queremos, ellos tienen su alianza y proyectos con la Alcaldía y no se quieren comprometer”.
José Germán Celis, edil de la comuna Cinco, reconoció que aunque fue poca la asistencias es “al menos un llamado que se le hace a la administración municipal”.
Y a renglón seguido, Celis lamentó que haya muchos líderes en la ciudad y no acompañaran a sus comunidades.
Informales se unieron
Jackeline Díaz, vocera de los informales, también se sumó a la protesta pacífica debido a que el decreto también ataca a los comerciantes informales con el pago de una cuota, sin que se hubiese dado cumplimiento al fallo del Contencioso Administrativo que obligaba al Municipio a una reubicación digna.
“Nos piden pagar 50 mil pesos mensuales por un M2 sin haber una reubicación digna, estamos pensando dónde está el Tribunal Administrativo para que se dé cuenta que están pisoteando y pasando por encima de la sentencia”.
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