Ayer, muchos de las camiones que llevaban comida no pudieron ingresar a la ciudad y en el lugar, además, se hicieron presentes autoridades municipales, que aseguran que los manifestantes se comprometieron a no cerrar la vía.

Hernán Celemín, uno de los campesinos y vocero de la comunidad, quien decidió concentrarse en el sector de Villa María, afirmó que lo que están haciendo es reclamar lo justo.

“Nuestra protesta es contra del Gobierno nacional, porque le están diciendo mentiras al pueblo; dicen que tenemos auxilios de 60 mil pesos, cuando eso no es cierto, a nosotros nunca nos lo han dado”, comentó el caficultor.

Agregó que el paso al Cañón del Combeima no se encuentra restringido, ellos están a ambos lados de la carretera y los únicos carros que no pasan, son los que llevan alimentos.

“Todos los que pasen de Ibagué a la vereda lo pueden hacer, pero para la ciudad no vamos a dejar entrar ni un plátano, ninguna clase de comida”, aseguró Celemín.

Al lugar llegó el secretario de Desarrollo Rural, Ramiro Arciniegas, quien comentó que están en constante diálogo con ellos, y que es respetable que los campesinos quieran adelantar su protesta impidiendo el paso de comida.

“Los alimentos pueden empezar a escasear y así se ha venido evidenciando en las plazas de mercado los últimos días; el compromiso es que no se vayan a presentar disturbios con la Policía y que no se cierre la vía”, indicó.

Según los campesinos, ayer en la mañana había temor por parte de los conductores de servicio público que a diario trabajan en la zona, pero al final dialogaron con ellos y las busetas pasaron con normalidad el resto del día.

Ante una posible amenaza de atentando contra la infraestructura del Ibal, el gerente Carlos José Corral, le solicitó a los comandantes de Policía reforzar la seguridad en la zona.