Con el inicio del trabajo conjunto entre la Superintendencia de Salud y Gobernación del Tolima, como previo a la entrega del hospital Federico Lleras Acosta al Departamento, las fricciones entre las dos partes empiezan hacerse más notorias.

Muestra de ello, es que una semana después de conformarse la Comisión para auditar el hospital, el gobernador Óscar Barreto, hizo fuertes cuestionamientos a través de su cuenta de Twitter.

Medio por el que insinuó que, al parecer, no se ha entregado la información solicitada y que la Superintendencia Nacional de Salud, habría exigido a los auditores un acuerdo de confidencialidad.

“En Hospital Federico Lleras no entregan información al equipo nuestro de auditoría, qué será lo que esconden?”, precisó el mandatario en un trino.

Y aunque el interventor, Alfredo Julio Bernal, evita hablar en detalle de la intervención con medios de comunicación, respondió al mandatario seccional.

Entre las precisiones que hizo está que con la llegada de la Superintendencia se empezó a publicar los procesos de contratación en el Secop, hecho que según su opinión, no se había hecho antes.

También manifestó que el gobernador Barreto estaría desinformado, ya que esta semana entregaron parte de la información importante, mientras que el resto se está consolidando.

Otro de los hechos que mostró el deterioro entre la relación Gobernación del Tolima y Supersalud, fue la presunta exigencia de la firma de un acuerdo de confidencialidad al Comité auditor, propuesta que no fue bien recibida por el Mandatario seccional.

Bernal respondió que así lo hacen las “empresas serias” y que además no hay porque “convertir un proceso serio” en un show mediático.

Agregó que está claro que el hospital es público, no obstante, “en legislación, hay límites claros en la divulgación de la información interna”.

Este seria uno de los trinos de Bernal,

“@OscarBarretoTol señor gobernador solo protegemos la información de su empresa de manos inescrupulosas q puedan hacer mal uso de ella”.

Mientras se discute quién tiene la razón, si el que recibe o el que entrega la entidad, se está dejando a un lado las necesidades que se mantienen al interior del centro hospitalario.