El reconocido comediante colombiano, Hugo Neimer González, más conocido como Lucumí, ha conmovido al país al revelar uno de los momentos más oscuros de su vida. Durante una reciente entrevista, el humorista de "Sábados Felices" compartió la aterradora experiencia que vivió cuando fue secuestrado en su juventud.

Nacido en Suárez, Cauca, Lucumí creció en medio de la violencia que azotaba la región. A pesar de las adversidades, su talento cómico lo llevó a convertirse en una de las figuras más queridas de la televisión colombiana. Sin embargo, detrás de su carismática sonrisa se esconde una historia de superación y valentía.

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Un encuentro con la muerte

Durante su adolescencia, Lucumí fue confundido con otra persona y secuestrado por un grupo armado. En medio de la selva, el comediante creyó que sus horas estaban contadas. "Me decían: Ahora, cuando amanezca, lo matamos", recordó con voz temblorosa. Sin embargo, gracias a la intervención de una guerrillera que se dio cuenta del error, Lucumí logró escapar con vida.

Este traumático suceso marcó un antes y un después en la vida de Lucumí. Obligado a abandonar su hogar y su familia, el joven comediante se refugió en Tuluá, donde comenzó a construir una nueva vida. A pesar de las dificultades, nunca perdió la esperanza y siguió cultivando su talento.

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De la tragedia a la fama

Hoy en día, Lucumí es uno de los humoristas más queridos de Colombia. Su carisma y su talento lo han convertido en un referente de la comedia nacional. Sin embargo, su historia es un recordatorio de que detrás de cada sonrisa hay una lucha y una historia de superación.