De la tranquila madrugada que hasta ayer vivieron los habitantes del sector de Picaleñita, al norte de Ibagué, no quedaron sino pocos recuerdos...
Esto por cuenta de dos accidentes de tránsito simultáneos que dejaron como saldo a cuatro personas heridas y a un muerto.
Los hechos ocurrieron uno tras del otro sobre la carrera 45 con calles 200 y 203, entre las las 5:30 y 6:30 de la mañana.
José Ever Sánchez, habitante del sector, pudo registrar con su cámara fotográfica la tragedia y el irrumpir de las sirenas de las ambulancias que llegaron para atender a los heridos.
Según contó este testigo, cuando se alistaba para salir de su casa , un impresionante choque fue provocado por un vehículo Mazda 323, de placa HIK-171, manejado por José Joaquín Vanegas, distribuidor de huevos, quien perdió el control del automotor colisionando primero contra las rejas de una casa y luego contra un poste de energía.
“En el transcurso de esta mañana, más o menos como a las 5:30 a.m., escuchamos un fuerte estruendo, y cuando salimos vimos que había un carro accidentado que se metió contra un poste de energía y una casa”, expresó Sánchez.
Según el reporte de las autoridades, en el vehículo se movilizaban dos personas y la primera hipótesis sería que el conductor se quedó dormido al volante.
“Fue un accidente muy fuerte. El conductor parece que venía de Girardot y estaba cansado porque no tenía tufo”, señaló el testigo.
Segundo accidente
Cuando aún los patrulleros de la Policía no terminaban de atender el primer hecho, un fuerte golpe que provenía de 100 metros más abajo de la vía alertó sobre una segunda colisión.
En el choque estuvieron comprometidos una buseta de la empresa Logalarza, de placa WTM-119, conducida por Jairo Alexander Hernández Lozano, de 34 años; asimismo, una moto de placa TTA78A, en la que se movilizaban los hermanos José Edgar (Q.E.P.D), de 22 años, y Fabián Mauricio Ortiz Cañón, el primero de ellos falleció en la Clínica Saludcoop de la 60.
Sobre este hecho las autoridades dijeron que posiblemente el motorizado no guardó prudencia en la distancia impactando por detrás a la buseta. Testigos señalaron que la buseta paró para recoger un pasajero.
Pidió ayuda desde el Abismo
Cuando se pensó que la racha de accidentes había terminado, la Policía recibió un tercer llamado.
Luis Eduardo Vera y su hijo Carlos Eduardo Vera Toledo, de 17 años, rodaron en una camioneta más de 30 metros por un abismo, en inmediaciones del sector de Boquerón, vía que conduce a Coello-Cocora.
Padre e hijo sufrieron lesiones leves al volcarse enel rodante de estacas, de placas JKH-679, cuando iban a retirar arena.
“Él me llamó desde el barranco y me dijo que estaba bien (...) enseguida le marqué a la Policía para que ellos le avisaran a las ambulancias”, dijo Elda Rosa Toledo, esposa y madre de los heridos.
El comandante de la Policía de Tránsito de Ibagué, teniente Andrés González, dijo que una de las puertas se abrió por accidente y en su afán por cerrarla el menor conductor se distrajo, chocando contra la vegetación de la zona.
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