La mujer de 31 años fue presentada por el Fiscal 19 local del grupo de flagrancias, ante el Juzgado Octavo de Garantías, donde no aceptó los cargos de hurto calificado y agravado tentado, y el uso de menores de edad para la comisión de delitos.
El hurto
Hacia las 7:50 de la noche, los empleados del almacén Falabella le avisaron a la Policía que una mujer fue captada por las cámaras de seguridad cuando en compañía de su hijo de nueve años de edad ingresó al cambiador. De allí, la mujer salió con cinco prendas puestas en su humanidad, las cuales no tenían los pines de seguridad, al igual que su hijo, quien llevaba dos busos, dentro de sus prendas de vestir, por lo que fueron abordados en la puerta uno del primer piso, donde no mostraron una factura de compra.
Como había un menor de edad involucrado, la patrulla de Infancia y Adolescencia entregó al niño a la Comisaría de Familia Permanente. Allí una tía de su progenitora lo recibió. Ortiz Cardona es natural de Bogotá y no tenía antecedentes penales.
El Juez de Garantías en el momento de imponerle la medida domiciliaria en el barrio Praderas de Santa Rita, señaló: “Que una progenitora utilice a su propio hijo, deja mucho qué pensar en cuanto a las pautas de guía con las que lo está criando”.
Cifra
360 mil pesos fue el avalúo de las prendas encontradas a la mujer y su hijo.
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