Transcurría el primer asalto de los ocho pactados en el combate de la categoría súpergallo cuando el tolimense Bélmar Preciado cayó a la lona, debido a un golpe certero de Élkin Rosario.

Fue un desplome que sorprendió al mismo ibaguereño, pero se levantó, no se precipitó, tomó el ritmo y sacó adelante la pelea, esa que preparó durante tres meses en la capital Musical al lado de los profesores Raúl y Ernesto Ortiz.

“Le conecté varios golpes, pero no pude mandarlo a la lona, se preparó muy bien. En el primer asalto yo caí, pero no fue un golpe decisivo, me levanté y saqué adelante el combate, dominando en cada asalto”, aseguró el Pijao.

El enfrentamiento mostró a un Bélmar con hambre de triunfo en el debut del año, siendo figura en la jornada del lunes, efectuada en las instalaciones del canal regional Telecaribe, en Barranquilla.

Mientras que Elkin no aguantó el ‘Rosario’ de golpes del tolimense, debilitándolo durante cada asalto, a pesar de conectar una que otra mano para intentar sumar puntos en la tarjeta de los jueces.

“Estoy muy contento. El combate me dejó una gran satisfacción porque corregí lo que efectué durante la última pelea. Me sentí más experimentado, manejé más el ritmo durante los ocho asaltos y no me sentí cansado”, sostuvo.

De esta manera, el púgil Pijao llega a su octavo triunfo, seis de ellos por nocaut, y un empate; entre tanto, Rosario acumuló 10 derrotas, tres de ellas por la vía rápida, en 16 peleas que suma como profesional.

“Siento que mi carrera va por buen camino, estoy concentrado en lo que quiero, que es disputar un título mundial. Estoy trabajando fuerte para que pronto pueda afrontar una pelea por el cinturón latino”, confesó.

Ahora se viene un leve descanso para el pegador tolimense, para luego continuar con su preparación con miras a lo que sería su décimo combate, el cual se efectuaría en mayo.