En la misma sintonía, esta actriz, consagrada a partir de su interpretación en la irónica ‘Belleza americana’, se suma a la lista de jóvenes que optan por no hipotecar sus vidas emocionales.

A diferencia de la descorazonada Katy Perry, fue Mena Suvari quien tomó la iniciativa de arreglárselas con su abogado para presentar la demanda de divorcio a la Corte de la meca del cine este último viernes, alegando “diferencias irreconciliables” con su marido el productor musical, Simone Sestito.

Mena y Simone se encontraron por primera vez en el Festival de Toronto (2007). Para el 2008 las alianzas de compromiso ya brillaban en sus dedos anulares.

Ellos contrajeron matrimonio en junio de 2010 en una iglesia de la Ciudad del Vaticano, Italia. Los dos tenían muy claro que querían darse el ‘sí, quiero’ en Roma, ya que la mayor parte de la familia del novio reside en la capital italiana.

Este es el segundo matrimonio de la intérprete, ya que estuvo casada con el cineasta Robert Brinkmann durante seis años.
Suvari y Perry siguen sumando divorcios, experiencia y libertad.

A propósito de divorcios, Perry estaría tratando de ocupar su mente en otras cosas para olvidarse de su ex pareja Russell Brand. Tan sólo unos días después de haberse anunciado su separación, la cantante sorprendió a sus aficionados al cambiar su color de pelo a uno azul encendido.