En la madera de los podados tocones de especie samán del terraplén de la calle 10, un atisbo de vida se manifestó en forma de hojas y brotes de verde frondoso. Durante los últimos días, varias imágenes han rondado en las redes sociales sobre la vegetación de algunos de los árboles centenarios, hecho que toma lugar tras casi 10 meses del suceso. 

Lo anterior, ha despertado una serie de comentarios en redes sociales y transeúntes del común, quienes analizan y opinan sobre el ‘brochazo’ de vida del ejemplar, tras la intervención que sufrieron los samanes durante una mañana de sábado.

‘Recorderis’ del suceso

La agenda pública de aquella semana, se encontraba centrada en la caída de uno de los ejemplares, luego de la intervención de un contratista, quien adelantaba una liberación de fuste. El 27 de abril, un árbol cayó al interior del Parque Centenario, acabó con la vida de Felipe Góngora y afectó gravemente a su pareja sentimental, que en aquel momento se encontraba en embarazo. 

Corría la mañana del 30 de abril del 2022 cuando, sobre el terraplén del Parque Centenario se encontraba una cuadrilla con personal operativo de la Administración municipal, en cabeza del entonces secretario de Ambiente y Gestión del Riesgo, César Augusto Gutiérrez, cuando comenzó la poda severa sobre los tradicionales árboles centenarios de la calle 10.

La intervención, en su momento, contó con la ayuda de Celsia e Infibagué para el desmontaje de las luminarias urbanas y operarios de Interaseo. Las razones de la poda estaban soportadas, según la Administración municipal, en los resultados de un informe fitosanitario en los que se revelaba una pudrición en las bases de los ejemplares.

En ese momento, la alcaldesa (e) Johana Aranda, hoy precandidata a la Alcaldía, aseguró: “Una vez conocida la evaluación por parte de la Corporación Autónoma Regional del Tolima, Cortolima, se evidenció la pudrición localizada en la base de estos árboles, por lo que se procedió a realizar esta labor silvicultural evitando el riesgo de caída o volcamiento sobre la vía principal”. 

A su vez, el secretario de Ambiente de ese momento señaló: “Es de precisar que necesariamente se debía realizar esta acción y trabajar en la conservación arbórea de este sector; para nosotros no es agradable tener que tumbar un árbol por la importancia ambiental y ecológica que tienen las especies, pero debíamos acatar este acto administrativo”.

Lo anterior, detonó la cólera de los ambientalistas y ciudadanos, quienes adelantaron todo tipo de actos simbólicos en contra de las medidas adoptadas por la Administración municipal en aquel entonces. 

Del acto surgió la veeduría ‘Red Los Samanes’, quienes estuvieron a la vanguardia de ‘echar para atrás’ el proyecto de intervención urbana ‘Operación Centenario’, hecho que concretaron tras varias acciones y reuniones con la Administración municipal.

De lo anterior, además, se pactaron una serie de consideraciones para la disposición final de las rodajas de madera, las cuales estarían destinadas para la elaboración de artesanías en conjunto con universidades y artistas de la ciudad.

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