Comandante Policía Metropolitana de Ibagué
Continuando con la temática de seguridad ciudadana, es prudente mencionar cómo la indiferencia de muchas personas ante una situación que los afecta y que se les convierte en un escenario normal, conlleva a un ambiente que genera pensamiento y comportamiento negativo en la sociedad, para lo cual se mencionarán algunas de la múltiples que se presentan en esta ciudad con el propósito de reflexionar en lo que se puede hacer para evitarlas.
Inicialmente y la mas típica está al observar cómo un ciudadano opta por dejar su mueble o colchón deteriorado en un andén a la suerte de que los habitantes de la calle lo reciclen e inicien un recorrido con este, hasta abandonarlo en cualquier otro lugar de la ciudad, aunado a aquellos que arrojan la basura en horarios y sitios no establecidos, grotesco escenario de suciedad y percepción de inseguridad que inicia una persona por falta de cultura ciudadana y de muchos vecinos que lo permiten. Es importante destacar que Infibagué e Interaseo, ofrecen servicio para recolectar este tipo de elementos en la puerta de la vivienda, tendiente a evitar ambientes de insalubridad que traen consigo afectación a la imagen de la ciudad.
Este tipo de indiferencia y aceptación afectan la percepción de seguridad de un barrio y de la ciudad en general, dejando una imagen negativa de la región y obviamente, la presencia de turistas podría disminuirse ante tal situación, debido a que este ambiente genera temor de la comunidad visitante, situación que se puede remediar con la unión de los vecinos y el aporte de cada uno de los ibaguereños y tolimenses.
Por otra parte, la indiferencia en algunos puntos de la ciudad ante la invasión del espacio público, observando cafeterías e incluso talleres de barrios sobrepasando el límite permitido de uso del suelo, obligando a los peatones a circular peligrosamente sobre la malla vial vehicular; pero, tal situación podría ser informada oportunamente a la Dirección de Espacio Público para que actúe de forma inmediata en el sentido de corresponsabilidad, para evitar este tipo de escenarios que afectan la seguridad y sana convivencia, oficina a la cual puede asistir cualquier ciudadano con sano interés de aportar algo bueno para su comunidad.
Se acude a estos ejemplos, para sensibilizar al ciudadano, en el sentido de que “mi libertad termina, donde empieza la de los demás” frase muy célebre si se tiene en cuenta que algunos exigen cuando son afectados, pero lo olvidan cuando afectan a los demás, evidenciado particularmente los fines de semana, cuando el llamado al 123 del CAD de la Policía Metropolitana, está relacionado por el exceso de ruido “equipos de audio alto volumen” y/o un vecino lavando el auto frente a su vivienda, siendo este último comportamiento una contravención al Código de Policía y obviamente está asociado al mal uso de los recursos naturales e invasión al espacio público. La cultura y seguridad ciudadana es un tema amplio y que compete absolutamente a toda persona, por lo cual continuaremos generando estas píldoras informativas, fortaleciendo conciencia sobre que la responsabilidad es de todos. DIOS Y PATRIA.
Comentarios