Se puede afirmar que ya se siente el ambiente navideño, los hogares se engalanan con hermosos adornos y colores, periodo del año tan esperado por aquellos que aman y disfrutan de la navidad, siendo el último bimestre donde la Policía Nacional redobla sus esfuerzos para garantizar el disfrute de las fiestas en sana convivencia; pero para ello, hay que tener en cuenta algunos factores de atención, que no solo deben ser preocupación para las autoridades, sino para la comunidad en general, haciendo referencia al inadecuado uso de elementos pirotécnicos que dejan como resultado inquietantes cifras de personas quemadas, incluidos tristemente niños, niñas y adolescentes, naturalmente, hay que recordar que la pólvora debe ser manipulada por personal experto, certificado para tal fin y no por improvisados osados de la pirotecnia.
En ese sentido, es bueno recordar a los ibaguereños y tolimenses la aplicación del artículo 30 Código Nacional de Policía y Convivencia, donde se tipifica los comportamientos que afectan la seguridad e integridad de las personas en materia de artículos pirotécnicos y sustancias peligrosas (fabricar, tener, portar, almacenar, distribuir, transportar, comercializar, manipular o usar artículos pirotécnicos, fuegos artificiales, pólvora o globos sin el cumplimiento de los requisitos establecidos en la normatividad vigente).
Invito a las habitantes de esta región a participar de forma activa en acciones diferenciales que impidan daños directos o colaterales a los menores; para ello, se requiere la voz y ejemplo del adulto responsable, máxime que algunas cifras señalan que entre los afectados estaría el género masculino mayores de 18 años quienes manipularon este tipo de elementos, algunos bajo el efecto de bebidas embriagantes, evento que impide tener plena conciencia de los daños que puede causar a su integridad física o la de los demás.
Destacar que el elemento que más daño estaría causando es el denominado “tote” el cual su apariencia indefensa conlleva a que el usuario pierda la atención en sus medidas de seguridad. Seguido de los conocidos “voladores” el cual debe ser muy sutilmente tratado en un ambiente controlado, pero este viene siendo manipulado en parques y vías públicas generando riesgo para los que allí se encuentran observando el evento.
Aunado a ello, es preocupante cómo las quemaduras, laceraciones y contusiones son las lesiones de mayor recurrencia por el inadecuado uso de artefactos explosivos. Si bien es cierto, no se han registrado casos de amputación durante los últimos dos años, las medidas que se deben adoptar están dirigidas a evitar que cualesquiera de las lesiones antes mencionadas se registren y/o materialicen afectando la integridad física de las personas, particularmente niños, niñas y adolescentes.
La Policía Nacional viene adelantando y reforzará las actividades preventivas y de control necesarias para evitar hechos lamentables que afecten la sana convivencia; no obstante, se acude al buen juicio de las personas para dos propósitos fundamentales en beneficio de la comunidad para el disfrute de una navidad sin lesionados por el uso de pólvora: primero, que no manipulen o permitan el uso de estos elementos a menores o adultos en estados de ebriedad; segundo, denunciar e informar oportunamente lugares que estén siendo utilizados para fabricar, almacenar y comercializar pólvora sin las condiciones de seguridad y legalidad y los cuales pueden generar un riesgo para los habitantes de Ibagué y el Tolima, por una navidad libre de quemados actúen con responsabilidad.
DIOS Y PATRIA
Comandante Metib
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