La innovación, de acuerdo con el Diccionario de la Real Academia Española, es la “Creación o modificación de un producto, y su introducción en un mercado”. Sin embargo, un nuevo concepto viene emergiendo, tomando forma y abriéndose paso en nuestro país: la denominada “Innovación Social” (IS).

Y qué es la “IS”?. Muchas pueden ser las respuestas: Es la forma de buscar soluciones creativas a muchos de los problemas actuales. También es entendida como la implementación de nuevas ideas, a través de productos, procesos, servicios, modelos o tecnologías, desarrolladas para cubrir necesidades sociales insatisfechas y que resultan más eficaces, sostenibles y justas que las existentes. En síntesis, pequeñas ideas que generan grandes transformaciones. De tal manera que un innovador social es aquella persona cuyas ideas y propósitos se convierten en acciones, que generan valor social y bienestar para las personas beneficiarias de su proyecto.

La “IS” ha sido utilizada abusivamente por empresarios, organizaciones y políticos, quienes en su afán de validar los cambios y enfoques novedosos de sus estructuras o modelos de acción, acuden a este concepto creando confusiones entre quienes aún no conocen los verdaderos alcances del mismo, tratando de confundirlo con la denominada “Responsabilidad Social”.

Identificar un modelo de “IS” no es tarea difícil. Éste se caracteriza principalmente por ser Sostenible, es decir, contar con financiación que permita su funcionamiento al largo plazo; Replicable fácilmente copiable; Económico, toda vez que tiene un costo reducido tienen en cuenta que generalmente está dirigido a población vulnerable; Participativo, pues parte de la sociedad y para la sociedad; en Mejoramiento Continuo, abierto al rediseño y la transformación; y es susceptible de convertirse en una Política pública o generar cambios a nivel local o nacional.

Para entender la “IS” de una manera más práctica y sencilla quiero poner como ejemplo y destacar la labor de un Tolimense, desconocida por muchos, pero un ejemplo nacional e internacional para cientos de miles. Su nombre Daniel Julián Cárdenas, director de innovación, investigación y desarrollo de la Red Salvavidas (@redsalvavidas), organización cuyo objeto de trabajo es crear, a través del uso de la tecnología, herramientas que permitan salvar, mejorar y cambiar vidas, en especial de la población vulnerable en nuestro país, como personas en situación de discapacidad, con enfermedades terminales o de alto riesgo, niñ@s, adultos mayores, entre otros.

El proyecto, que está en fase de ejecución, y en el que hoy tienen puestas todas las miradas la comunidad “IS” se denomina: @tatisproject.