Constituye una de las más generalizadas violaciones de los Derechos Humanos y un problema de salud pública mundial y, sin embargo, con demasiada frecuencia, se silencia, minimiza, racionaliza, se niega y muchas veces se acepta por los individuos y la sociedad.

La violencia ejercida contra la mujer por parte de Hernán Dario Gómez, entrenador de la selección Colombia, y el posterior debate nacional, sacan a la luz pública el cotidiano drama de miles de mujeres violentadas por su pareja, por familiares o simplemente en episodios callejeros. No es sólo la violencia física la que padecen; es, además, la violencia verbal, psicológica, económica y de negación de sus derechos. En el debate se ha conocido cifras de violencia a nivel nacional que reflejan la tragedia de la violencia contra la mujer en un país con tres millones de desplazados, altos niveles de pobreza y un conflicto que ya dura cinco décadas.

Ibagué, infortunadamente, presenta cifras alarmantes de violencia contra la mujer. Encuestas demuestran que de 10 mil 833 casos de violencia intrafamiliar ocurridos entre los años 2004 y 2009, el 73 por ciento de ellos se dio contra la mujer y el 27 por ciento restante, perteneciente al género masculino, en su mayoría fue contra niños. La causa principal de la agresión se dio en el contexto de conflictos familiares, con un 68.5 por ciento, lo que refleja el carácter violento del hombre que lleva la discusión familiar a la agresión y a la violencia física contra la mujer.

Se encontró, además de la violencia física, que el 24 por ciento de las mujeres había sufrido violencia verbal; un 18 por ciento, de la psicológica, y un 14 por ciento, de la violencia económica. Una quinta parte de las mujeres sufrieron violencia sexual.

La violencia, la agresión, la humillación y el sufrimiento de la mujer en Ibagué se resumen en las siguientes cifras: 38 por ciento fue golpeada; 17 por ciento, empujada; 15 por ciento, golpeada y empujada, y 13 por ciento, golpeada, empujada, arrastrada y pateada; en tanto, los porcentajes restantes incluyen heridas con arma blanca. Cifras que podrían denominarse de la infamia.

El publicitado episodio del entrenador Hernán Dario Gómez es una fotografía de la violencia contra la mujer en Colombia, situación que no cambiará hasta que no se tome consciencia en el estado y la sociedad que mientras exista esta clase de violencia un país no puede llamarse civilizado.

El segundo tema de actualidad la salud es la publicitada reunión del presidente Santos con las asociaciones médicas para anunciar cambios en el sistema de salud. Sin profundizar, los cambios anunciados tiene más de buenas intenciones que de realidad pues chocan contra dos murallas insalvables: la vigente Ley 100 de 1993 y la 1438 de 2010; ambas leyes mantienen incólume el esquema de intermediación financiera de las EPS. “Que todo cambie para que nada cambie”.