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Como autor de la iniciativa que finalmente redujo el Impuesto de Valor Agregado (IVA) en los tiquetes aéreos del 19% al 5%, logramos beneficiar a los viajeros y reactivar la demanda y la oferta del mercado aéreo en Colombia, tanto en destinos nacionales como internacionales.
Las cifras reportadas por la Asociación Colombiana de Agencias de Viajes y Turismo (Anato) demuestran que se tomaron decisiones acertadas, ya que durante los meses de julio, agosto, septiembre y octubre, se registró una reactivación superior al 70% en la salida de colombianos al exterior, siendo España, Canadá, México y Estados Unidos los países preferidos. Adicionalmente, el mercado nacional avanza en su estabilización y destinos como Cartagena, San Andrés, Santa Marta, Barranquilla y Medellín son los más solicitados a las aerolíneas por parte de agencias de viajes y usuarios particulares.
Gracias a la Ley de Turismo pudimos recuperar y fortalecer el tejido empresarial de los pequeños, medianos y grandes negocios que operan en la denominada industria sin chimeneas.
De un lado, se estableció un marco normativo para incentivar a estas empresas y con la entrega del subsidio de 439 mil pesos por trabajador, se protegió el empleo de más de 100 mil colombianos que viven directa o indirectamente de la cadena turística.
Por parte de Cotelco, Asociación Hotelera y Turística de Colombia, se indica que es positivo el comportamiento de los indicadores. Para septiembre la ocupación se situó en 51%, superior en un 11% respecto al mismo mes de 2020.
En este escenario las noticias son muy alentadoras para nuestra región, pues el Tolima y el Alto Magdalena se consolidaron como unos de los destinos más visitados, logrando que en el noveno mes del año se alcanzara un 63% en ocupación, superando en un 16% a lo logrado en 2019.
No obstante, seguimos trabajando por aquellos empresarios hoteleros que no solo reciben pocos ingresos, sino que estos pocos van dirigidos a compensar los compromisos financieros heredados de la pandemia y otro tanto de sus ganancias se usan en garantizar los gastos de funcionamiento de sus negocios.
Si la tendencia de recuperación se mantiene y crece en los siguientes meses, es muy probable que se amplíen las ganancias y así recuperar las pérdidas económicas que se produjeron debido al Covid-19, lo cual depende también que los gobiernos seccionales y municipales se involucren en políticas públicas orientadas a fortalecer la cadena del turismo en las regiones y que se logre una articulación con ejes como el hospedaje, la gastronomía y las actividades culturales, para que estas también mejorar positivamente.
Las perspectivas positivas de recuperación continúan tras la confirmación del Ministerio de Hacienda, que anunció que el 88% de los empleos perdidos en la pandemia fueron reactivados, lo cual se ve reflejado en la tasa de ocupación y en un mayor movimiento de actividades asociadas al comercio, las manufacturas y el entretenimiento.
Es momento entonces de no bajar la guardia y trabajar unidos en retornar a la senda del crecimiento de la economía y así garantizar mayor bienestar para todos los colombianos. El viento parece estar nuevamente sobre la popa. Sigamos avanzando.
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