Con agria polémica a bordo,  desde finales del año pasado, la Dirección de la Cámara de Comercio de Ibagué se encuentra acéfala. Sí, acéfala, porque la Presidenta Ejecutiva encargada es sólo peón de brega al servicio de algunos miembros de la Junta Directiva, convencidos que de facto tienen derecho a coadministrar, entre ellos, su Presidente.

Hoy, aliñado y en la puerta del horno, esta el nombramiento de quien dice: “No me han ofrecido nada”, pero hizo lobby con todos los miembros de la Junta.

El hombre es Silverio Gómez, economista con experiencia periodística en Portafolio, El Tiempo, Citytv, Suma de NTN24, revista Poder y noticias RCN radio. En este momento es Director de la revista Mundo Minero y, es vox populi su ambición de ser gobernador del Tolima, pretensión que ha ratificado en círculos públicos y privados.

Preguntas a la Junta Directiva. ¿Si nombran Presidente Ejecutivo a quien aspira a la Gobernación, por qué entre las justificaciones para sacar a Guillermo Espinosa estuvo su remoto pensamiento de llegar a la Alcaldía? ¿Les parece correcto, que un total desconocido para los votantes tolimense, use la Cámara para hacerse visible en el Departamento? ¿Les parece congruente utilizar la Cámara como trampolín político de quien apoya la locomotora minera, plan del Gobierno Nacional repudiado en el Tolima? ¡Ojo! Tolimenses

Afirman que tiene importantes contactos. Pero, la  Cámara necesita un prospecto que además de relaciones, tenga lo que Gómez no tiene: óptimas habilidades gerenciales. Porque la Cámara, a más de buen desempeño en servicios corporativos, con eficacia, calidad, orientación continua, fortalecimiento de capacidades empresariales y visión integral a largo plazo, tiene que favorecer el desarrollo económico de su jurisdicción, para que alcance niveles competitivos y bienestar creciente e incluyente.

Aseveran que los empresarios van a ser liderados por el enemigo, porque Gómez, subestima y menosprecia la provincia y su clase económica y social, pues parece que aunque obtuvo éxito, no ha superado sus resentimientos. Agregan que en conocimientos periodísticos puede ser “estrato seis”, pero como ser humano es “estrato cero no indigente”. Y, siendo benigna y parca con los epítetos escuchados, aseguran que es prepotente, grosero, desagradable, falso y traicionero. Claro, nadaría como pez en el agua entre algunos miembros ídem de la Junta.

Apuestan en tres meses  la luna de miel, después estaría agarrado de las mechas con ciertos miembros que querrán sacarlo a puntapiés. Sin embargo, lo tendrán que sufrir o pedirle que haga mutis por el foro pagándole un billete largo. Cosa que no importa porque la Cámara tiene plata para despilfarrar. Igual, lo han hecho con aquellos que antes de nombrarlos no captaron su ineptitud o, con quienes no admitieron la coadministración, que desde hace tiempo han impuesto algunos miembros de la Junta Directiva.

Post scriptum/ Parece que como premio a Sandra Ligia por eliminar talanqueras en la coadministración, impondrán Vicepresidencia Ejecutiva.