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Han sido poco menos que convidados de piedra. Se les notó silenciosos y complacientes, cuasi amanuenses de lo que sucede en la capital del Tolima, su control político, fiscal y en defensa de los derechos brillaron pero por su ausencia; son poco menos que un mal chiste sus pocas actuaciones en estos años. Bueno almenos las que se les conocen.
Si hay una platica que al parecer se perdió, se despilfarró, se mal invirtió del erario, de lo que se paga con los impuestos y demás que los ibaguereños y colombianos aportan día a día fue la girada y pagada a ese trío invisible de Concejo, Contraloría y Personería. Cero resultados concretos y efectivos para frenar la corrupción, los escándalos por licitaciones chalecos o a contratistas cuestionados, por obras que no se hicieron, no se ejecutaron, no se terminaron o acciones que se prometieron del Gobierno local y no se hicieron o por demoras excesivas en ejecuciones. Su aparente parsimonia, formalismo, procedimentalismo, protocolo y hasta posibles amiguismos sin duda aportaron a la triste realidad del municipio hoy.
Por eso, la elección del nuevo Concejo municipal el próximo octubre toma tanta relevancia, para que allí lleguen hombres y mujeres capaces, estudiosos, comprometidos, con altos estándares éticos y valores que les permitan hacer el control político y cumplir con sus deberes mínimos como trabajar, sesionar, presentar proyectos de acuerdo, porque los que salen quedaron con una enorme deuda en eso. Con que no sean flojos, trabajen un poco, estudien a ratos y abran la boca en plenaria o comisión sería adecuado, para que marquen diferencia con estos que se van, que salvo una o uno y medio, no sirvieron para nada a Ibagué. Bueno, a ellos mismos, quizás mucho.
Además, porque serán los cabildantes quienes elegirán precisamente al Personero y Contralor de Ibagué ¡ y Dios quiera que esa platica no se vuelva a perder¡ y sean seres corpóreos y no etéreos como las o los actuales- no sé ni cómo se llaman, creo que la mayoría de ibaguereños tampoco- que aparecen solo para la foto o rueda de prensa cada vez que la ciudad sufre una emergencia o situación como la de las basuras hoy, el paro de busetas, de taxistas, las protestas barriales por falta de agua, de docentes y demás que son tan comunes. Como solo aparecen para el show cabe preguntarse entonces dónde estaban para prevenirlas, advertirlas, colaborar en su solución primaria y evitarlas de ser preciso.
Por tanto, el llamado respetuoso es a que todos elijamos bien a esos nuevos concejales que tienen una enorme responsabilidad - ojalá la entiendan- y no sean simples monigotes y cuasi parásitos como muchos de los actuales, que van a vivir de una renta paga por sesión a nombre del trabajo honesto y esforzado de los demás que habitamos esta Villa de San Bonifacio de las Lanzas de Ibagué.
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