“La evolución de nuestro presidente, el doctor Raimundo Angulo Pizarro, registra una leve mejoría, con índices esperanzadores en los niveles de creatinina y oxigenación”, dice el CNB a través de un comunicado. Hay que decir que la creatinina es “un producto de desecho generado por los músculos como parte de la actividad diaria. Normalmente, los riñones filtran la creatinina de la sangre y la expulsan del cuerpo por la orina”, según explica Medline Plus, el servicio de información en línea de la Biblioteca Nacional de los EE. UU. Cuando hay un problema con los riñones, la creatinina se puede acumular en la sangre y sale menos por la orina, por eso es un buen indicador de que la salud renal de Raimundo Angulo mejoró hoy.

Y, en cuanto a la oxigenación, es una buena noticia porque indica que sus pulmones, que también han sido duramente afectados por el virus, han mejorado en sus funciones.

“En la Unidad de Cuidados Intermedios, se avanza en la lucha contra el COVID-19, que ha afectado su sistema pulmonar”, añade el CNB y explica que la etapa más difícil de la infección será la que Raimundo enfrentará en los próximos tres días. Se estima, además, que “en los primeros días de la próxima semana se cumpla una mejoría sustancial tanto en la condición pulmonar como en el resto de los órganos que se ven usualmente afectados por esta enfermedad”.

Hay que recordar que, como lo explicó su hijo Carlos Felipe Angulo, Raimundo es asistido por un respirador artificial. “Como cualquier paciente de COVID-19 que ha sido intubado, el pronóstico de supervivencia es del 50%”, le dijo Carlos Felipe a El Universal.

No hay certeza de cómo se contagió y solo se sabe que un día antes de padecer los primeros síntomas salió a un supermercado y al banco, después de tres meses de estricto aislamiento en casa. Hay que recordar que el presidente del CNB tiene 77 años y es paciente diabético.