Una nueva crítica surgió ayer contra la gerencia del hospital Federico Lleras Acosta, a cargo de Iván David Hernández, pues si bien no se ha podido estabilizar el pago de los salarios a los vinculados por cooperativa, la entidad buscará un leasing por seis mil millones de pesos con el sistema financiero para dotarse de tecnología.

De otra parte, la cartera sigue en niveles preocupantes y de 86 mil millones de pesos cuando se realizó el último paro, esta semana llegó a los 92 millardos.

Hay que avanzar
La situación financiera del hospital Federico Lleras Acosta sigue siendo preocupante, pues los salarios a los empleados de cooperativas sumó nuevamente los dos meses, es decir que se les debe unos 10 mil millones de pesos, en tanto que la cartera se habría estancado.

Aún así, la IPS más grande de la región insiste en adquirir equipos, mediante un trámite financiero para mejorar la facturación en niveles III y IV.

Consultado por el tema, Hernández, sostuvo que “cuando adquirimos la sede de El Limonar (antiguo Seguro Social), la idea era dotarnos de tecnología para atender patologías más delicadas.

“Esta última parte no se ha podido realizar por falta y problemas en el flujo de recursos.

“Ante esta situación y revisando los escenarios financieros, y recordando que la clínica se obtuvo con base en un préstamo, vamos a realizar un leasing con el sistema financiero para adquirir equipos.

“Entre estos se encuentra un resonador magnético, un tomógrafo, un equipo para quimioterapia y un equipo especializado para cirugía cardiovascular. Estamos adecuando las instalaciones para ello”, indicó el Gerente, quien sostuvo que “los equipos tendrán un costo de seis mil millones de pesos”.

Para qué
Al indagar al gerente para qué estos instrumentos y cómo se van a pagar, dada la crisis financiera de la entidad, respondió que “estos servicios los necesita el Departamento, es decir que existe una demanda puntual sobre los mismos.

“Hoy en día los pacientes con patologías relacionadas con cáncer y cardiopatías, que son de las de mayor incidencia en el Tolima, tienen que desplazarse a otras instituciones.

“De esta manera, vamos a poder atender todos estos pacientes directamente y con ello se mejorará la facturación”.

En cuanto a la forma de pago, manifestó que “el leasing no interfiere con el flujo actual ni agudiza la crisis.

“Por el contrario, se tramita con un banco privado el tema, los equipos se obtienen mediante un arrendamiento y con el uso de los mismos se va pagando el valor de estos instrumentos”.

Recordó que un leasing es un préstamo con opción de compra y “no compromete otros recursos relacionados con los servicios. Lo que se pignoran son los equipos y no las rentas del Hospital”.

Agregó que esto no es para preocuparse, pues dichos instrumentos fortalecer los niveles III y IV que cuentan con mucho más flujo de recursos, en tanto que el cuello de botella del recaudo se encuentra en el II.

Esta operación viene siendo consultada con la Secretaría de Salud, Secretaría de Hacienda y con los bancos que tienen alguna relación con la Administración Seccional.

La decisión es avanzar en el tema, pues en el peor de los mundos y en un escenario negativo, lo peor que puede pasar es que el banco recoja dichos instrumentos.

“De igual forma, estamos pensando en los usuarios, pues la población tolimense no puede acceder a estos servicios especializados directamente, y cuando son trasladados a otras instituciones se encarecen los costos”.
    
DEUDA
En cuanto a la cartera y la gestión para disminuirla, se conoció que han existido reuniones con la Procuraduría General de la Nación para que se hagan efectivos los compromisos adquiridos con las EPS, que adeudan 92 millardos de pesos.
“La mesa para tratar el tema se trasladó directamente a la Procuraduría en Bogotá en donde estuvieron 25 IPS frente a 20 aseguradoras y se generaron nuevos compromisos.
“Estamos esperando que después de las declaraciones del presidente Juan Manuel Santos sobre la reforma en salud y la nivelación del POS, haya también una decisión puntual para acabar con la intermediación en el sector y que los recursos puedan llegar directamente a las prestadoras.
“De nada sirve que nos obliguen a prestar el servicio de manera universal si los recursos no llegan y no se eliminan ciertas barreras”, declaró Iván David Hernández.