Por ahí, no es la cosa…
Cuando todo el mundo espera conceptos “fuera de serie”, teorías sofisticadas, novedosas, claras y audaces, sobre lo que debe ser nuestro país, no falta quién, interpretando una mala definición de una teoría política, sale con unos cuentos, “todos raros”, copiados de las épocas en que las hipótesis extremistas hacían carrera en la sociedad moderna.