La evidencia judicial indicaba que el cuerpo de Clara Inés, de 70 años de edad, quien trabajó por más de una década como abogada en el Tolima, había sido enterrado en la finca ‘Rancho JO’ de su propiedad, en la vereda El Mirador, del municipio de Meseta (Meta). 

La exhumación del cadáver se efectuó luego de que integrantes del Gaula de la Policía, en coordinación con el Cuerpo de Investigación Judicial (CTI) de la Fiscalía, capturaran el pasado 15 de septiembre a José Rafael Hueso y Fredy Fajardo, este último administrador de la finca, como principales sospechosos del secuestro y homicidio de la septuagenaria. 

Según se pudo conocer, la matrona fue raptada el 4 de junio de este año y sus captores, quienes se hicieron pasar por integrantes de la guerrilla de las Farc, exigieron por su liberación 150 millones de pesos a cambio de respetarle la vida. 

“Fajardo Ávila y Hueso están recluidos en la cárcel de Villavicencio, por su posible participación en los delitos de secuestro extorsivo agravado y desaparición forzada, mientras se realiza la adición posterior del delito de homicidio agravado, ante los nuevos hechos conocidos por la Fiscalía Especializada del Gaula”, informó en su página la Fiscalía General de la Nación.