Ayer hacia las 6 de la tarde fueron desatadas las cadenas con las que Julián Aguiar decidió imponerse en huelga de hambre, ello, con tal de que le devuelvan a su bebé de ocho meses de edad.
Según este hombre, las cadenas y su huelga no eran más fuertes que su deseo por volver a tener a su primogénito en el seno de su hogar.
Aguiar, completó 36 horas sin comer un solo alimento y sin recibir tampoco alguna atención médica por parte de las autoridades.
“La Defensoría del Pueblo para este caso brilló por su ausencia. Al sitio sólo llegaron unos policías para decirme que no se lo podían llevar porque era legal mi protesta.
En un comunicado de prensa el Bienestar Familiar dijo que el Instituto actuó en favor del menor y que hoy se definirá la situación.
Credito
REDACCIÓN JUDICIAL
Comentarios