Hechos
El sujeto aceptó los hechos que señaló la Fiscalía encargada de su caso. En la acusación, la delegada del ente acusador señaló que el hecho ocurrió el 26 de diciembre del 2015 cuando Laura Quimbayo, madre de la víctima, dejó a la niña bajo el cuidado del hombre y el de su progenitora, Rosa Cardozo Soto, en una casa de Modelia, pues se iba a encontrar con el padre biológico de la menor en el centro de la ciudad. Él le entregaría una muda de ropa para la niña y dinero para su manutención.
Tras dicho encuentro, la progenitora de la pequeña retornó a la vivienda y su suegra, madre del hoy condenado, le dijo que su retoño estaba en la USI de El Salado porque supuestamente convulsionó por un bon bon bum que se había comido.
Por su parte, en el centro asistencial Cardozo Soto explicó al personal médico que la niña sufría de diabetes. Aparentemente la niña permaneció hospitalizada varios días y falleció a principios de enero de 2016.
Frente al caso, el Instituto de Medicina Legal dictaminó que el angelito sufrió una muerte violenta, producto de maltrato físico y golpes que había recibido en la cabeza y abdomen aquel 26 de diciembre. Se pudo determinar que la agresión le causó las convulsiones y no ocurrió luego de comerse un dulce, como lo aseguró Cardozo Soto.
El proceso sigue en su contra
Rosa Cardozo Soto, madre del condenado, es también investigada por el homicidio de la menor de edad. El proceso en su contra sigue, ya fue acusada y enfrentaría el juicio oral en su contra por el delito de homicidio agravado, del que fue víctima su nieta putativa.
Comentarios