Sin más ni menos, el propietario de una finca en Matanza, Santander, agredió violentamente sin ningún tipo de compasión a un niño que estaba bajando mangos de un árbol de dichas tierras. 

Aunque habían varios menores en el lugar, él se ensañó con uno de ellos por presuntamente robar la fruta de su finca.  Al parecer, el pasado lunes, los jóvenes iban de paso después de ir al río. Sobre las 4:30 p.m., se acercaron a una finca en la que se divisaba un árbol de mango. Los menores decidieron ingresar en la propiedad privada y bajar algunos frutos del ‘palo’.

Sin embargo, los pequeños fueron sorprendidos por el supuesto propietario de la finca. El hombre, sin mediar palabra, agredió a uno de los menores a machete. Pese a las súplicas de los demás niños, el individuo siguió agrediéndolo hasta dejarle varias heridas en el cuerpo.

Los demás lo auxiliaron hasta acercarlo a la carretera. Un taxi decidió movilizarlos hasta el centro hospitalario más cercano.

La madre del menor herido se acercó a la finca en la que habían agredido a su hijo, pero el involucrado no se encontraba en la propiedad.

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