Las investigaciones sobre la muerte de Mateo Jaramillo Hoyos, el joven docente de inglés de la Universidad Pontificia Bolivariana (UPB) hallado sin vida en su apartamento, han comenzado a arrojar los primeros resultados, según confirmó la Policía Metropolitana.

Gracias a la revisión de las cámaras de seguridad del sector donde residía Jaramillo, las autoridades lograron identificar a dos hombres que ingresaron a su vivienda entre las 9:45 y las 10:30 de la noche del pasado sábado. El coronel William Castaño, comandante de la Policía Metropolitana, informó que estas dos personas son ahora los principales sospechosos en la investigación.

Un dato relevante que surgió de la inspección del lugar de los hechos es que se descartó la hipótesis de un hurto. 

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“Allí se pudo ya establecer preliminarmente de dos hombres que ingresan al apartamento, pero después de haber hecho la inspección, pues observamos que no hubo hurto de ninguna de las pertenencias, allí estaban todos sus objetos de valor”, comentó el coronel Castaño. 

El reporte oficial de homicidios, proporcionado por la Secretaría de Seguridad del Distrito, revela que el cuerpo del docente presentaba signos de asfixia mecánica y que fue encontrado atado de pies y manos. Este detalle refuerza la línea de investigación que descarta el hurto y sugiere un posible ataque directo contra Jaramillo.

Las autoridades continúan trabajando para esclarecer los hechos, identificar plenamente a los sospechosos y determinar las causas que llevaron a este lamentable suceso que ha consternado a la comunidad educativa de Medellín. Se espera que en los próximos días se den a conocer nuevos avances en la investigación.