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La música no se encontraba entre los planes de vida de Sidney Jiménez; el tenor se estaba preparando para ser sacerdote, sin embargo decidió trasladarse a Bogotá a estudiar Matemática Pura en la Universidad Nacional, y en su acercamiento a la capilla de la Institución de Educación Superior, esta lo encontró.
“Me vinculé al coro de la capilla de la Universidad, el director que era Hugo Lozano, me sugirió ser cantante lírico; en ese momento no estaba consciente de qué era el canto lírico y seguí en la carrera de matemáticas. Al siguiente semestre me metí a un curso libre en el auditorio León de Greiff que era de voz y técnica vocal, y ahí me dicen que debo estudiar canto lírico”, contó Sidney.
Fue así que el baritenor decidió ingresar al Conservatorio de Música de la Universidad e inició este amplio recorrido que lo ha llevado a conocer cerca de 25 países gracias a su talento.
“Hacia el 2003 gané el concurso de Ópera al Parque y desde entonces no paro. Me vinculé a la Fundación Jaime Manzur donde fui durante unos 17 años barítono titular, canté muchos roles protagónicos”, contó.
El músico también hizo parte de la Fundación Ópera de Colombia y ganó una beca de la Fundación Carolina para estudiar en la Escuela Superior de Música Reina Sofía, de Madrid – España. Igualmente, estudió en el Liceu Barcelona, con el que tuvo la oportunidad de cantar en muchos lugares.
Su apuesta por democratizar la ópera
El artista ha estado en un gran número de fundaciones y grupos con los que ha buscado innovar en la ópera, motivo por el que ahora promociona su obra ‘Ópera, instrumentos y sus colores’, con la que busca llegar a todos los públicos y romper los estigmas de que este género musical solo es para la clase alta o las generaciones mayores.
“Es una manera lúdica y didáctica de hacerle comprender a la gente lo que es el canto lírico.
Lo que hacemos ver es que cualquier tipo de persona puede cantar y asimismo que el arte lírico está más vivo que nunca. Lo queremos popularizar, de hecho también trabajo en musicales”, comentó.
Sidney hizo un CD de música con canciones colombianas y mexicanas, algunas escritas por el compositor ibaguereño José Castillo, con las que demuestra que la ópera se puede expandir y mezclar de diferentes formas.
Por eso en su obra, los espectadores escucharán una apuesta variada, “van a encontrar una propuesta en la que la audiencia va a tener elementos de rock, pop, música lírica y algo de góspel”, refirió Sidney.
La producción ya se presentó en Manizales y tuvo muy buena recepción, la idea es llegar con esta a Ibagué.
Planes para la Capital Musical
Dentro de los planes del cantante lírico ibaguereño está su ciudad natal, el músico contó que ya ha tenido algunos acercamientos con la Secretaría de Cultura Municipal con el fin de traer la obra a Ibagué.
A través de esta, Sidney busca aportar al título de la ciudad como Capital Musical y de paso, enamorar a las nuevas generaciones con este género.
Se espera que la presentación pueda hacerse para el semestre b del año entrante.
“Proponemos un concierto de una hora aproximadamente de música y teatro en vivo. En el escenario, cuatro cantantes y un actor que hace también las veces de presentador y/o narrador, acompañados por un pianista. El presentador relata una historia que va siendo interrumpida por breves fragmentos musicales (máximo de 7 minutos) a medida que en ella van apareciendo personajes que simbolizan, según su tipo de voz, los diferentes sentimientos humanos. De este modo los asistentes van escuchando las cuatro voces fundamentales: soprano, mezzo-soprano, tenor y barítono (bajo), a veces solas y en otras obras musicales las podrán disfrutar en un ensamble en grupos (duetos y coros)”, describió Sidney.
DATO
Espera llegar el próximo año con su obra a la Capital Musical.
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