La cerveza artesanal se diferencia de las industriales, ya que sus ingredientes son completamente naturales, sin conservantes de ningún tipo: agua, levadura, lúpulos y maltas simplemente, lo cual resalta cada uno de sus sabores, olores y texturas. En las cervezas artesanales los detalles lo son todo: la combinación de formulaciones produce una amplia gama de matices que potencializan los recorridos experienciales.

En esa evolución Ibagué no se ha quedado atrás y para este fin de año hay ofertadas diferentes rutas de catas de cervezas artesanales, desde fabricadas por investigadores de la Universidad del Tolima con base en la alcachofa o creadas a partir de café de Líbano, uno de los de mayores calidad del país.

Alberto Escobar es uno de los miembros fundadores de Homebrew.57, un lugar que mezcla una gran variedad de cervezas artesanales con un acercamiento al universo cervecero, cuenta que al inicio fue difícil por la falta de cultura alrededor de este tema, pero que poco a poco el mercado se ha ido ampliado.

Además de Alberto Escobar, los otros socios fundadores son Dumas Velandia y Andrey Sosa. Es un equipo que trabaja para promocionar el sector en Ibagué.

“Nuestro proyecto inicial era comenzar a vender cursos cerveceros y ofrecer todo lo necesario para que las personas fueran a sus casas y prepararan sus propias ‘polas’, siempre con nuestro acompañamiento. Pero aún no era el momento porque la cultura cervecera apenas iniciaba, así que le dimos la vuelta a la idea y creamos un pub diferente a todos los demás”, afirma.

Ese camino de aprendizaje comenzó como un hobby muy personal. Un amigo de Alberto tenía mucha más experiencia en la fabricación artesanal de cerveza y fue quien lo inició.

En Homebrew.57 ofrecen más de 60 referencias de cervezas artesanales, todas nacionales con la intención de apoyar la industria local y del país: “apoyamos a los pequeños cerveceros y a la microcervecería colombiana”, dice Alberto Escobar.

La mejor forma de ir conquistando consumidores que aprecien la maestría que puede haber detrás de una cerveza es contarles directamente que ahí, en ese vaso espumoso en torno al cual se reúne un grupo de amigos, hay una variedad de aromas, sabores, texturas y colores cuyas combinaciones pueden proporcionar un amplio abanico de percepciones.

Otra opción es la orientación para maridar alguno de los muchos platos que ofrece con la cerveza y que mejor combine: churrascos, hamburguesas, salchichas artesanales tipo alemanas, chorizos santarrosanos auténticos, tapas españolas, entre otras.

Las catas como forma de aprendizaje

Con las catas de cervezas que ofrecen en Homebrew.57 se busca que sean los mismos visitantes quienes puedan analizar los colores, aromas y sabores de las bebidas: “les contamos qué pueden experimentar con la cata, el porqué del color, del aroma o de los amargos… es decir todo. Nosotros somos maestros cerveceros y transmitimos en cada cata el amor por lo que hacemos”.

Hay dos grandes tipos de cervezas: las lagers, más suaves, ligeras, refrescantes, y ale, con mayor contenido de sus ingredientes y más destacadas en aromas, colores, sabores y niveles de alcohol.

“Para nosotros lo primordial es saber si la persona que nos visita sabe algo de cerveza artesanal o es su primer acercamiento. Si ya sabe algo, pues nosotros profundizamos en esa experiencia; Pero si es su primera vez, para nosotros es una gran oportunidad de mostrarle un poco de todo eso que sabemos”, agrega Alberto Escobar.

La cata consiste en la prueba de cuatro estilos, comenzando con el más suave al más fuerte.

“Hay que fijarse en su olor, su color, su textura y su sabor. Es un proceso lento, en donde hay que detenernos en cada paso para encontrar lo que la cerveza busca transmitirnos”.

Homebrew.57 está ubicado en la Cra. 7 #57-75 barrio Piedrapintada. Instagram: @homebrew.57

El plus de  lo artesanal

Las diferencias entre las cervezas industriales y las artesanales inicia por el hecho de que estas últimas no utilizan aditivos artificiales ni conservantes. “La industria nos ha acostumbrado a consumir cerveza de mala calidad. Gracias a la baja categoría de los ingredientes que utilizan es que le pueden sacar tanta utilidad. En cambio, en una cerveza artesanal el cliente se toma el 100 % de los ingredientes, es una diferencia muy grande”, sostiene Alberto Escobar.

La multiplicidad de las recetas permite que los visitantes se sientan como un niño en una dulcería, expresa Alberto Escobar, y agrega que, además de los diferentes sabores, hay un gran número de colores de botellas, etiquetas, diseños y, sobre todo, historias detrás de la cerveza.

“Cualquier persona que nos visite se va a enamorar de por lo menos una cerveza: sea una de sabor a malta, caramelo o afrutada. Pero también hay de mango biche y sal, lulo y sal, maracuyá y sal, sandía, cereza, mora, café, cacao, lactosa… en fin. Ese toque que da el maestro cervecero”, finaliza.

Homebrew Ibagué está ubicado en la Cra. 7 #57-75 barrio Piedra Pintada.

Instagram: @homebrew.57

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