"La mayor parte de la colección poética de Tranströmer está impregnada de ahorro, de concreción y de metáforas expresivas", añade la academia. En sus últimas obras Tranströmer "tiende a un formato aún más reducido y a un grado aún mayor de concentración", explica el comunicado de la Academia.
Tranströmer estaba nominado desde 1973. hacÃa 40 años que ningún escritor sueco obtenÃa el premio. A través de su obra, Tranströmer sugiere que el examen poético de la naturaleza permite sumergirse en las profundidades de la identidad humana y en su dimensión espiritual.
En sus poemas abundan las metáforas y las imágenes, que ilustran escenas simples de la vida cotidiana y de la naturaleza. La muerte, la historia y la naturaleza son temas recurrentes en su obra.
El poeta sueco sufrió en 1990, después de publicar decenas de antologÃas, una apoplejÃa que le dejó parcialmente paralizado y afásico y que le obligó a reducir sus actividades.
Su primera antologÃa la publicó con 23 años, cuando era todavÃa estudiante en psicologÃa, titulada "17 poemas", en una de las mayores editoriales suecas, Bonniers, con la que siguió a lo largo de toda su carrera.
Seis años después del ataque volvió a la literatura con la antologÃa titulada "Góndola fúnebre", de la que se han vendido 30 mil ejemplares, una buena cifra para el género de la poesÃa.
Su última publicación se remonta al año 2004, con "El gran enigma", una antologÃa de 45 haikus. Desde entonces se centra en su otra pasión, la música, y toca a diario el piano, aunque solo con la mano izquierda, debido a la parálisis.
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