En la misiva, los mandatarios señalan que sus territorios “se encuentran entre los lugares que más violencia y dolor han vivido en medio de la guerra y, por esto, apoyamos con esperanza y expectativa la anunciada firma y del nuevo acuerdo de paz”.

Asimismo, manifiestan su apoyo y compromiso con el proceso de paz e indican estar más confiados ante el nuevo acuerdo, porque se trata de “un pacto más completo, que servirá para la consolidación de una paz estable y duradera”.

“No podemos darle más largas a esta oportunidad histórica que nos interpela como Estado y como sociedad”, advierten.

Para los alcaldes de Cartagena de Chaira en Caquetá, Miranda, Buenos Aires y Caldono en Cauca, Policarpa y Tumaco en Nariño, Vigía del Fuerte, Dabeiba, Remedios e Ituango en Antioquia, Fonseca en Guajira, Villarica y Planadas en Tolima, Tibú Norte de Santander, Macarena en Meta, La Paz en Cesar, San José del Guaviare, Arauquita en Arauca, Riosucio en Chocó, Mesetas en Meta y Tierra Alta en Córdoba, ha sido fundamental la persistencia del mantenimiento del cese al fuego y hostilidades bilateral.

En el documento, los mandatarios expresan que el cese al fuego ha servido para contrarrestar la incertidumbre y el desánimo generado por los resultados del plebiscito, y además, ha contribuido a seguir garantizando la seguridad de sus territorios azotados por el conflicto armado.

Los alcaldes indican que, “tienen la ilusión y el deseo de ser los primeros protagonistas de las nuevas páginas de la historia colombiana; las primeras administraciones locales encargadas de la transformación territorial del país y de dejar atrás los relatos de sangre y lágrimas que nos han caracterizado”.

Debido al riesgo que tiene el cese al fuego, por la dilatación del nuevo acuerdo, los alcaldes exigen “buscar salida jurídica y política a este proceso y se implementen los protocolos que se han establecido en el acuerdo”.

También solicitan se brinden las garantías necesarias para los mandatarios de estos municipios que tienen a su cargo esta gran responsabilidad y rechazan de manera categórica los actos de violencia que se vienen presentando a lo largo y ancho de nuestro país. Finalmente, solicitan de manera urgente que el mecanismo de Monitoreo y Verificación inicie sus labores en los territorios.