“El virus nos pone en riesgo, la inconsciencia, nos mata”

Comandante de la Metib

Cuantos colombianos quisieran gritar “cesó la horrible noche”, pero vemos que con el paso del tiempo esto se ve aún más lejano, y no por falta de voluntad de nuestros mandatarios, sino por el capricho de algunos, que después de 60 días, aún siguen pensando que esto es un juego.
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Con la reapertura de algunos sectores productivos de la sociedad, no solo viene el afán incesante y acelerado de querer recuperar las finanzas, sino también la responsabilidad que usted y yo tenemos para evitar más contagios, mientras se desarrolla una vacuna.

Lo que se debe entender, es que los permisos para salir a laborar y devengar un sustento para mejorar la calidad de vida de nuestras familias, es eso, “Vida”, y no por el contrario, tal y como lo perciben ciudadanos irresponsables, que al salir de casa, se disgustan porque se les hace el llamado de atención por no llevar puestos los elementos de bioseguridad necesarios; no entienden que lo que queremos es que lleguen bien a sus hogares, que contribuyan con el bienestar de sus familias,  y los mantengan a salvo.

Ningún país del mundo, por más sólida que sea su economía, puede mantener confinados por tiempo indefinido a sus connacionales, porque se requiere de esa mano de obra para generar recursos; lo que quiere decir que en algún momento  se debía dar este paso, y es en este preciso momento, donde la responsabilidad deja de ser del todo de los gobiernos y pasa a ser de nosotros mismos.

Y es que responsabilidad, no es nada más que el autocuidado y la exigencia a nuestros semejantes; es hacerle caer en la cuenta a nuestros familiares, vecinos, compañeros de trabajo, que de su salud depende la mía y viceversa; porque de nada sirve no enviar a nuestros hijos al colegio, si el padre, la madre o hermanos que salen a trabajar, lo hacen sin tapabocas, o sin lavarse las manos, ya que saldrían a traer el virus a las entrañas de nuestro hogar.

No podemos, ni permitiremos que aquellos “necios”, que no quieren acatar las normas, contagien a los demás, con la simple excusa de que “algún día nos vamos a morir”, como lo han manifestado en algunas oportunidades, donde en cumplimiento de nuestro deber, nos vemos en la imperiosa necesidad de realizar órdenes de comparendo a esos individuos, que por un simple capricho o por falta de formación en valores y respeto, no quisieron protegerse o proteger a sus seres queridos.

Ojalá que aquella frase célebre que dice que: “la disciplina, algún día terminará venciendo a la inteligencia” aplique en nuestra sociedad y que aquellos que se creen “repúblicas independientes”, se den cuenta que Somos Uno, Somos Todos.

Dios y Patria.

CORONEL GABRIEL BONILLA GONZÁLEZ

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