a inseguridad y el tímido repunte en la lucha contra el desempleo (tercer puesto a nivel nacional con un 17.6 por ciento de desocupación), entre otros, los ibaguereños se sienten cada vez más orgullosos de su ciudad (76 por ciento), y la perciben como ese  histórico “buen vividero”, título que le ha sido otorgado por propios y extraños a la capital musical de Colombia. Igualmente, sienten que son menos pobres y que tienen un mayor nivel de satisfacción en temas como educación, alumbrado público y prestación del servicio de gas domiciliario y energía eléctrica.  

Así lo revelaron los resultados del Programa “Ibagué Cómo Vamos” que por segundo año consecutivo dio a conocer la encuesta de percepción ciudadana 2011 en las instalaciones de la Cámara de Comercio de Ibagué.

Sin embargo, y como era de esperarse, el nivel de insatisfacción en cuanto al servicio de acueducto y alcantarillado, prestación del servicio de salud, protección del medio ambiente y movilidad urbana aumento considerablemente. Mientras el 52 por ciento de los ibaguereños piensan que la ciudad va por buen camino, la seguridad sigue siendo el tema con mayor impacto en la capital tolimense, las últimas muertes violentas ocurridas así lo demuestran, y aunque el proyecto de la Policía Metropolitana para Ibagué ya es casi una realidad, la articulación del trabajo de las autoridades públicas y policivas encaminado a la prevención del delito deberá ser replanteado y rediseñado hacia estrategias que no se queden en el campo meramente restrictivo y prohibitivo.

Las 1.000 personas encuestadas en esta oportunidad, según la ficha técnica presentada por Ipsos-Napoleón Franco, se pronunciaron frente a las líneas base de trabajo en las cuales deberían centrar las propuestas el próximo Alcalde de Ibagué, encabezando el tema del empleo (82 por ciento), salud (50 por ciento), educación (39 por ciento), seguridad (37 por ciento) y atención a la población Vulnerable (16 por ciento).

Un aspecto que llamo particular atención fueron las preguntas realizadas a los encuestados respecto de cómo debería ser el perfil del próximo Alcalde, a lo cual respondieron, no ser corrupto (50 por ciento), tener un buen Programa, ideas y propuestas (47 por ciento), tener preparación para gobernar (17 por ciento), no utilizar la Alcaldía para fines particulares (23 por ciento). Lo anterior contrasta con los resultados de la percepción ciudadana en materia de gobernabilidad e institucionalidad, teniendo en cuenta el decrecimiento que presentó la imagen de favorabilidad, conocimiento y confianza en el alcalde municipal de Ibagué.

“Ibagué como vamos” se ha convertido en una herramienta fundamental para medir y evaluar los cambios en la calidad de vida de la población, donde los indicadores utilizados señalan cuales son las verdaderas necesidades sobre las cuales deberán trabajar quienes aspiran a regir los destinos de nuestro Municipio. Lamentablemente fueron muy pocos los candidatos a los diferentes cargos de elección popular los que asistieron el evento, lo que pone en riesgo la efectividad del trabajo que se han propuesto realizar de llegar ser elegidos, pues difícilmente puede edificarse una propuesta seria sin tomar en cuenta programas como éste, que hoy por hoy, cobran una extraordinaria vigencia en este año electoral que estamos viviendo. Candidatos, ¿cómo vamos a proponer soluciones desconociendo los estudios y diagnósticos de los problemas y necesidades de nuestra ciudad?


(*) Abogado Universidad de Ibagué

Especialista en Derecho Constitucional y Administrativo Universidad Catolica

Especialista en Derecho Penal y Procesal Penal Universidad de Ibagué

Especialista en Derecho Penal Economico Universidad Castilla y la Mancha (España)

Especialista en Derecho Constitucional Universidad de Salamanca (España)

Estudios de Maestria en Derecho Universidad Sergio Arboleda -Actualmente-